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[Ju CAPÍTULO III mis hermanos religiosos. Fui para la diócesis de Riobamba; pero pude estar unos cuantos días en Quito, ocupado en pequeños trabajos y especialmente en preparar la venida de un Equipo permanente para esta campaña americana. No pude entrar en Oriente [Misión Capuchina de Aguarico]; pero pude saludar al P. Camilo y a Fr. Mariano, que hace tanto tiempo no veía. Magníficos misioneros los dos" 79 • Ya se ve que el P. Jaime vive entrañablemente las cosas de la Orden. "He quedado muy edificado de los religiosos. Los ejercicios han durado siete días completos más los de entrada y salida. Muy intenso y no ha faltado ni el detalle de los maitines a medianoche" 80 • A continua– ción dará una nueva tanda, como los anteriores no en el convento sino en la Casa de Ejercicios 81 • El P. Custodio quería que junto con los ejercicios se dedicara se estudie "en ellos un poco acerca de la organi– zación del apostolado de la Custodia y tal vez pueda aportar algunas experiencias de Colombia en el campo parroquial" 82 • El 1963 estará de nuevo con los hermanos, quizás en dos ocasiones. El 11 de marzo escribe al Provincial de Navarra. "Acabo de llegar a [¿de?] Ecuador. En tres años la Custodia tiene un aire completamente distinto. La nueva obra ha inyectado en todos un formidable optimismo. Creo que ha de ser fácil terminar toda la obra sin endeudarse lo más 79 Carta al Provincial P. Florencio Rubio. La Misión de Aguarico, confiada por la Santa Sede a los Capuchinos nueve años antes (1953) era para la Provincia como el emblema de la generosidad, desde que nuestros hermanos tuvieron que salir de China, expulsados por los comunistas (1962). El P. Jaime habla de dos "magníficos misioneros". Tal es el recuerdo que han dejado, el P. Camilo de Torrano Camilo Múgica y Fray Mariano de Ázqueta (Díaz de Cerio), carpintero. Este murió ahogado en el río Napo (1-Vll-1964). 8 ° Carta al Provincial P. Florencio de Artabia, Quito, 27 noviembre 1962. 81 Al hablar de "la casa de Ejercicios" los hermanos se referían, sin más, a una Case existente en Quito, regentada por las Auxiliares Parroquiales, fundadas por el sacerdote vasco don Pío Gurruchaga. 82 Carta al Provincial P. Florencio de Artabia, Bogotá, 26 septiembre 1962.