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POR UN NUEVO CAMINO QUE COMIENZA A HACERSE enEritreahabía comenzado en 1969por obradel capuchinoP. Medhanie Ghebrezghiabher, primer asistente espiritual 217 • Con el entusiasmo de este capuchino se construyó un local digno para las reuniones, encuen– tros populares, tienda, contando con la elaboración de. todos; ."Por contraste, te parte el corazón constatar que actualmente algunos de nuestros miembros tienen verdadera dificultad para contribuir siquiera con 25 centavos de dólar al mes" 218 • Eran las consecuencias crueles de la guerra. Mas, pese a todas las dificultades de la guerra, los desplaza– mientos forzados, y a una ideología destructora, el noviciado seguía recibiendo nuevos candidatos, y la fraternidad seglar podía hacer su reunión mensual y su retiro anual. El futuro se veía políticamente del todo oscuro por la guerra. La fraternidad vivía tiempos heroicos; muchos cristianos emigraban a Sudán, 360 km. a pie desde Asmara. Ya pesar de todo, había un germen de juventud, signo de esperanza. Visita a Filipinas Los capuchinos habían crecido en Filipinas y ya eran una provincia de laOrden llena de juventud. El paso por Filipinas estuvo precisan1ente dedicado a la Juventud Franciscana. La Juventud Franciscana se había establecido oficialmente en 1984. Eraun pequeño grupo. En 1987 se dio una especie de nuevo comienzo, y en 1990 eran 47 grupos con un total de unos 1.500 miembros. El P. Jaime pudo comprobar la vitalidad de estos grupos y animarles ensuvocaciónfranciscana. Unasimpáticafoto de laJuventudFranciscana 211 Véase el reporte de Mrs. M. Y. Vice-Minister, Eritrea O.F.S, en: Tertius Ordo 51 (1990) 32- 33, seguido de The Franciscan Youth in Asmara. 218 Art. cit., 32.