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POR UN NUEVO CAMINO QUE COMIENZA A HACERSE 151 En la Familia Franciscana nadie puede estar ausente de testimoniar al otro el carisma franciscano, de cuidar la vocación franciscana. Es un deber mutuo el deber de este testimonio. Por ello nos hace mucho mal, cuando nuestros hermanos, a los que nos sentimos vitalmente unidos, nos olvidan. Miradnos con amor. Seguid nuestra vida con amor y responsabilidad. Varía mucho, según las circunstancias concretas, la presencia de los seglares franciscanos en las actividades y en los eventos de la Familia Franciscana. Predomina, siguiendo la tradición de todo este siglo, la colaboración en la actividad misionera y en las obras de beneficencia. Como un signo nuevo se puede citar la participación de los seglares en las diversas reuniones y convenios por la paz celebrados en Asís, y en los equipos que, en nombre del Centro .Internacionalpara lapaz entre lospueblos, han sido portado:-es de mensajes de paz a los jefes de los pueblos" 206 • Con esta larga cita, que ha merecido la pena, hemos tocado un punto sensible para el alma del P. Jaime y de Manuela Mattioli. En el fondo, se trata del principio, indicado en otro lugar, de la reciprocidadvitaldel carisma: el carisma evangélico de tinte franciscano es uno; las formas de expresarlo son múltiples. JuventudFranciscana, otro eslogan ¡;fvo, línea defúturo. Seguimos con el testimonio del informe, que no es mera crónica sino exposición de los ideales y pistas por donde va la Fraternidad Seglar de san Francisco. "Una nota propia de este bienio es el esfuerzo de las Juventudes Franciscanas por superar las fronteras del propio país. La Juventud de Toscana colaboró activamente en el encuentro internacional de jóvenes para la paz, promovido por el cardenal Piovanelli. Más de tres mil 206 JAIME ZuDAIRE, en: AOFMC 104 (1988) 452-453.