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necesitamos conversión, que necesitamos perdón. Si no, todo se mueve en una especie de voluntarismo de muy poco efecto. 33. Conocimiento de la doctrina social de la Iglesia Para nuestras opciones en el campo social y para nuestra presencia entre los pobres se promueva en todas nuestras fraternidades el conocimiento de la doctrina social de la Iglesia, incluso durante los periodos de formación específica (inicial y permanente). Un sector del Consejo creyó útil volver sobre ese lugar de aprendizaje espiritual que es la doctrina social de la Iglesia como ayuda para entender cómo ha de ser nuestra presencia en el mundo de los pobres. Puede que sea interesante. Pero es algo que se sitúa en la teoría mientras no se ve a la estructura eclesial tomar opciones históricas de inserción en medios pobres. Y eso es harina de otro costal. La presencia entre los pobres por parte de la Iglesia no se construye especialmente a partir de una doctrina social sino de apuestas concretas de inserción y de profecía social. 34. El 7CPO como instrumentos formativo Todas las circunscripciones se comprometan en vivir las propo– siciones ofrecidas por el VII CPO. Con esta finalidad se progra– men encuentros de sensibilización y experiencias concretas, en el ámbito de la formación inicial y de la formación permanente. Se insta a las circunscripciones a vivir las conclusiones del 7CPO. Paraello se apelaa la formación permanente con las proposiciones como cauce útil. Lo será. Pero en la línea de experimentar en carne propia la minoridad, la formación habría de consistir más en proyectos comunes de minoridad que en cursillos sobre la misma. Por otra parte, el posconcejo, hoy por hoy, no estáprogramado, con el consiguiente riesgo de que, si alguien no nos sacude, esto pase sin pena ni gloria. 0D