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INTRODUCCIÓN La Orden Capuchina celebró en marzo de 2004 su VII Consejo Plenario de la Orden (7CPO) con el título y tema: NUESTRA VIDA FRATERNA ENMINORIDAD. "Peregrinos y .forasteros en este mundo, sirviendo alSeñor enpobreza y humtldad" (1R 6,2). En una institución numerosa y con gran influencia, tanto religiosa como social 1 , un acontecimiento e.SÍ no puede pasar desapercibido para sus miembros. Y aunque bien es cierto que la importancia de las conclusio– nes del 7CPO es en el posconsejo donde ha de verse, el peligro de que los grandes acontecimientos de la Orden pasen "desapercibidos" por los hermanos y por nuestros contextos es grande. Lo mismo ocurre en la Iglesia y en la misma sociecad. El vértigo social en el que se mueve nuestro hoy hace que corramos el peligro de no engendrar nada, porque todo alumbramiento necesita tiempo amplio para la gestación 2 • Nuestro tiempo está tan avasallado por la sucesión de acontecimientos que volver sobre hechos de hace unos meses es como si volviéramos a la Edad Media. No hay que esperar al olvido para que la huella de nuestras vivencias se esfume; en pocos días, debido como decimos al pisarse de los acontecimientos los unos a los otros, lo vivido incluso a nivel de Orden, pasa al limbo de lo ya archivado. Es preciso conjurar este peligro y la desgana que lo acompaña. 1 La Orden Capuchina cuenta con más de 11.000 miembros y está presente en 93 países. 2 "No tengo más remedio que considerar que la mayor desgracia de nuestra época, de este tiempo que nada madure, es que devoramos cada instante al cabo de un instante, que arruinamos el día antes de que acabe, y que así vivimos siempre al día, sin engendrar nada" (Goethe, noviembre de 1825). [JJ