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persona o por medio de su vicario general. En esta intervención debemos señalar varios momentos: El oficio para entregar la iglesia a los capuchi– nos, el inventario del ajuar de dicha iglesia, así como del oratorio de san Bartolomé de Rocaforte, el permiso de fundación de la Orden en Sangüesa y la ayuda a la misma. 61. El oficio para entregar la iglesia a la comunidad de capuchinos, que ya operaban en el convento, estaba preparado ya desde el 27 de diciembre de 1897. Pero en Palacio fue retardada su entrega muchos meses hasta que se ajustasen otros aspectos, civiles y canónicos. El 13 de octubre de 1898 comunicaba el Señor Obispo de Pamplona a Don Eladio Navarro el envío de dicho oficio, "para que confíe V.la Iglesia de San Francisco a los Capuchinos". Al mismo tiempo le daba instrucciones concretas sobre el inventario del ajuar de dicha iglesia y sobre la forma de levantarlo y firmarlo,junto el superior de los capuchi– nos. Eran formalidades, que debían cumplirse y archivarse 46 • Pensamos que el prelado dirigió esta carta a Don Eladio Navarro, que no era el arcipreste, sino un simple beneficiado, porque era quien promovía la restauración y quizá porque se ocupaba del culto dominical y festivo en dicha iglesia, o quizá por que el arcipreste estaba ausente. Inventario de la iglesia de san Francisco de Sangüesa 62. Obedeciendo las normas del obispado de Pamplona, se aprestaron a levantar el inventario de la iglesia de san Francisco el arcipreste Don Javier Bandrés y el superior delegado de los capuchinos, P .Bernardo María de Pamplona 47 • El documento reflejaba en parte la situación de la 46 Este oficio se halla original en ACSF leg.11 sin fol. En una post data se refiere el prelado al altar y la campana, sobre los que no había podido ver todavía los antecedentes. Sería mejor no incluirlos en el inventario y dejarlos a una resolución posterior. 47 Conocemos al arcipreste Don Javier Bandrés desde la primera instancia para que los franciscanos volviesen a su convento. El P.Bernardo María de Pamplona presidía el grupo de capuchinos, que de hecho se había trasladado a Sangüesa y se había alojado en la parte menos ruinosa del convento; desde ella hacían vida de comunidad y 44

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