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Este dato es de importancia, ya que prueba que la iglesia franciscana nunca estuvo cerrada, sino que en ella prosiguieron el culto el vicario y beneficiados de la parroquia de Santiago. Lo que no impidió su posterior y progresivo detioro. Parece que según la doctrina general de la desamortización no debían pasar a bienes nacionales las iglesias y sus anejos. En tal caso, parecía lógico que pasasen a la jurisdicción del Ordinario de lugar, aunque no hemos visto expuesta con claridad esta doctrina. De hecho, parece que las iglesias conventuales quedaron sin culto, fueron unidas al resto del edificio y se subastaron junto al mismo. De ahí que encontremos tantas iglesias degradadas y convertidas en almacenes, en talleres y graneros. 19. El decreto terminaba con un mandato para que todas las autorida– des y los ciudadanos diesen estricto cumplimiento a la ley, emanada de manera especial para san Francisco de Sangüesa. Este decreto debe ser entendido como una piedra miliar en el camino de la desamortización, ya que salvaguardó el convento y la iglesia de su perdición y ruina total. Postura inicial de los franciscanos de Cantabria A partir del mes de marzo de 1880 el convento de san Francisco perteneció al Ayuntamiento de Sangüesa, que le dio diversos usos sociales. No conocemos por ahora detalles sobre la dedicación del mismo a la enseñanza escolar y al acuartelamiento de tropas militares; tan sólo anotaremos el día que éstas abandonaron el convento. En ambos momento y durante la década de 1880 consta que no se atajó la degradación del inmueble, lo que fue llenando de angustia a no pocos sangüesinos. El que más se significó en la tarea de la conservación del convento y en la vuelta al mismo de los franciscanos fue el sacerdote Don Eladio Navarro 16 • 16 No hemos visto ninguna nota biográfica sobre el mismo. En la documentación que exhumamos se encontrarán diversos rasgos sobre su fisonomía humana y espiritual, muy dignos de tenerse en cuenta. No se trataba de un presbítero corriente, sino de profunda espiritualidad y de amplios horizontes pastorales. 21