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Retablo y las columnas también se les quitará sus emparrados y ubas, dejando limpio su salomónico. Que todo el coste de quitar la talla y dejar en forma dicho Retablo deberá ser de cuenta del conbento. Y echo así se pasará a prepararlo, dándole las manos necesarias de aparejo y bien cerradas sus grietas y Repelos de la madera se recorrerá todo conforme arte. Echo así se dorarán todas sus molduras, así las picadas como las lisas; se dorarán tanbién todas las basas y capiteles de todas las columnas de dicho Retablo, siendo el oro de buen color y calidad, y bruñendo la~ partes que corresponda y bronceando las demás, que todo lo re*ante del Retablo deberá ser a imitación de piedras jaspes, varianqo éstos de diferentes jaspes conforme corresponda para su buena contraposición y todos barnizados y lustrosos. Así mismo se pintarán y encarnarán los santos que ay en dicho Retablo conforme corresponda a cada uno, y lo demás de jaspe en la forma dicha arriba. Y dando los andamios necesarios el conbento para la construcción de la obra, será su coste cuatrocientos pesos,con las condiciones expresadas arriba por todo el mes de Abril de el año mil ochocientos y tres. Y por ser así lo firma en este convento de san Francisco de Sangüesa a diez y nuebe de Junio de Mil ochocientos y dos. Juan Josef del Rey (rúbrica) 9 • 9. No es de este lugar insistir más en los fondos archivísticos sobre esta prehistoria del convento de san Francisco, tanto en los archivos franciscanos de la Provincia de Aragón, de Burgos y de Cantabria, como en los civiles, tanto generales, como de la misma ciudad de Sangüesa 10 • 9 Este proyecto para pintar y dorar el retablo de la iglesia se halla enACSFleg.lsinfol. Ayuda no poco para imaginar cómo era el retablo barroco de la iglesia actual; sin duda se estropeó al tiempo de la exclaustración y tuvo que ser reemplazado por otro sencillo de madera, construido por los ebanistas capuchinos, que fue el que conoci– mos durante muchos años. 10 Es el camino arduo que es obligado seguir cuando se intenta un estudio de historia local. Los libros de metodología orientan en ocasiones sobre la naturaleza especial de estos estudios locales. 17