BCCCAP00000000000000000001203

publicaron las Actas en 1963. En su discurso sobre las Peregrinaciones y el Culto a los Santos, el historiador español J.M. Lacarra reconoce que los dos grandes santua– rios, Roma y Compostela, estaban unidos por un Camino, acomodado con sus hospederías, recorrido por gentes que hacían ambas peregrina– ciones. El profesor de la Universidad de Bologna, Pío Rajna, habla de este mutuo intercambio en la publicación titulada: "Diario histórico literario italiano", volumen VI, pág 112-162 (año 1885); en la página 124, nº 3, dice lo siguiente: "Muchísimos se movilizaban en España para visitar San Pedro, y muchos en Italia para visitar Santiago". He aquí la diferencia: los españoles son muchísimos hacia San Pedro, los italianos sonmuchos hacia Santiago... El Camino enEspaña, dirigido a Compostela, diseñado por Sancho el Mayor de Navarra, era más seguro y más tranquilo que el suelo italiano con sus treinta o cuarenta repúblicas enemistadas unas con otras, y en guerras continuas. Tenemos el ejemplo de Asís con sus veintitrés mil habitantes, república independiente, en guerras continuas con sus vecinos. En una de ellas tomó parte San Francisco, cayendo prisionero de los perusinos; fue encerrado en una cárcel húmeda, saliendo de ella con una malaria crónica que reapareció en su viaje a España, y, a causa de su gran penitencia, llegó probablemente a una tuberculosis ósea, junto con una afección de tracoma adquirida en Egipto, que lo dejó ciego en los dos últimos años de su vida; ciego y tuberculoso, cantó el Canto del Hermano Sol. Dante Alighieri llama en la "Vita Nuova", palmeros a los penitentes o viajeros que venían de Tierra Santa, porlas ramas de palma que traían en sus manos. Romeos o Romeros, a los que volvían de Roma, y peregrinos a los que iban y volvían de Compostela, por ser el Apóstol Santiago el que fue sepultado más lejos de su tierra; los peregrinos impresionaban con su hábito, su bordón, las veneras o vieiras y el calabacín o cantimplora. "Chiamansi peregrini in quanto vanno alla casa di Galizia, pero che la sepultura de Sa Yacopo fue piu lontana della sua patria che d'alcuno altro apostolo" (Vita Nuova, XL). 7