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4ue venía era su patria, aguardaban con filosofía. A fin de cuentas, cuando se fueran los extranjeros, toda la Iglesia quedaría en sus manos. El clero chino estaba bastante acomodado y no se esforzaba demasiado. Una de las noticias más frecuentes de la China Continental era que la postura de cierto tipo de clero subterráneo era de una intransigencia total, tanto con la llamada Iglesia Patriótica como con el Gobierno. Los datos que recibí por esos días señalaban la existencia de unos seis millones de católicos. (En China los datos siempre son sui generis). Los obispos -todos- unos cien. Los sacerdotes alrededor de 2.000 y los religiosos de ambos sexos unos 1.500. Había unos 17 obispos casados, algunos de ellos en circunstancias muy comprensibles. Los sacerdotes en su mayoría permanecían célibes; y los jóvenes, todos. Anotaba yo uno de esos días: "Esta situación ha traído mucho malestar en la Iglesia China. Y a veces los culpables son los obispos y sacerdotes ocultos, debido a sus posturas rígidas y poco caritativas". Hoy añadiría: intransigentes y ansiosas de poder. Sin embargo, la tónica general de la Iglesia era su marcha hacia la unidad; y en esto, el clero joven era mucho más flexible. De Pingliang supe que tenía seis sacerdotes y 12 religiosas. Por tratarse de una zona tan alejada, se la conocía poco; pero también, por lo mismo, el gobierno central molestaba menos. Como sucede siempre, todo depen– día del mando en turno, tanto en la ciudad de Lanzhou como en Pingliang. A Monseñor Ma Ji, el gobierno lo tenía como contestatario y perma– necía siempre en el punto de mira de la policía política. De las otras dos misiones capuchinas, tenía pocos datos, sobre todo de la de Heilonghiang, Manchuria, que estuvo al cargo de los capuchinos austríacos. ¿Qué se hacía en estos momentos en favor de los católicos chinos? Se les ofrecía profesores a los seminarios, cuando el gobierno lo permitía. Se enviaban regularmente libros religiosos, traducidos en Hong Kong o Taiwan, objetos para el culto, dinero para la reconstrucción de iglesias y otros proyectos que presentaban los obispos por vía particular y secreta. Cuando yo observé tantos trabajos y esfuerzo realizados en favor de 2X

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