BCCCAP00000000000000000001201

APUNTES DE CAFETERIA 0Q De ser 'cuestionado', pasó a serelegido definidory secretarioprovincial en 1975, cargos que ejerció por un trienio, trabajando desde esta platafor– ma en la unificación y renovación de la Provincia. Muy pronto fundó el Secretariado Rioplatense de CEFEPAL y la revista TAU como boletín informativo de todo el Cono Sur (en un principio apareció como órgano informativo para los capuchinos, y luego de toda la familia franciscana de la región). Había comenzado a vincularse con CEFEPAL- Chile, y, a partir de 1977, pasaba en Santiago algunas temporadas cada año. Fue reelegido definidor por otro trienio, pero ya estaba muy metido en la actividad interfranciscana y con CEFEPAL de Chile, y los dos integrantes de CEFEPAL, uno de ellos Ignacio Larrañaga, solicitaron a los Superiores del Cono Sur que Camilo fuera incorporado al Centro (Secretaría). Y, de nuevo, el relato de Ignacio: "En septiembre del año 1979 el Hno. Camilo se integró en el equipo de CEFEPAL (Centro de Estudios Franciscanos para América Latina) con sede en Santiago de Chile donde, fuera de pequeños intervalos de ausencia, habría de permanecer hasta el final. Fueron años muy intensos, y desde el primer momento se sintió muy bien en el Centro por su ambiente intelectual; allá se integró sin esfuerzo al dinamismo del grupo. Por muchos años fue director de la revista Cuadernos Franciscanos. Fue una época en que Camilo se sintió en la plenitud de su vida, en que sus afanes innovadores fueron en aumento, participando creativamente en Asambleas internacionales en varios paí– ses, colaborando en las labores editoriales de mis libros y otros libros de carácter franciscano que editaba el Centro. Escribió un precioso librito llamado El joven Francisco; y más tarde otro libro que recoge todo su proceso de maduración llamado Espejo de lmpeñección. Por largos años compartió inquietudes y sueños conmigo, en una amistad fuertemente consolidada, en un intercambio de ideas e ideales, primero en Santiago Centro y luego, en Lo Barnechea, al pie de la cordillera, en una casa llamada CASA FUNDACIONAL, propiedad de la institución internacional llamada "Talleres de Oración y Vida", recono– cida por la Iglesia como Asociación Internacional de fieles, de Derecho Pontificio y con personalidad jurídica, Asociación en cuya expansión el Hno. Camilo participó por largos años con entusiasmo apasionado y gran acierto.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz