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devotísima, con manos de ángel para la gubia y el escoplo, si bien roma su pluma a la hora de versificar, festivo siempre y fraternal. En pantalla, fotografía de fray Bernardíco. Limosnero: Recuerdo unos versicos suyos: Arga: "En este mundo mezquino todo llega y todo pasa, y el pobre capuchino si tiene harina amasa". Hablaba del buen decir. Ya en 1919 nace aquí Zeruko Argia, en euskera, y cinco años más tarde, su hermana, Verdad y Caridad, ambas a dos, con pena, ya enterradas. En 1951, como suplemento poético de la revista STUDIUM, nace en este colegio de teología Vértice, honrada por su alta calidad literaria en un estudio a nivel de tesis doctoral. ¡Casi nada! Y otras revistas, de distinta índole, tales como Nunc, Ser, Verbo. ¿Quién no recuerda las bellas paginas populares de Pepito Reyes, su viacrucis hondo, sencilo, devoto? Y los romances cantarines de Prudencia de Salvatierra, entre otros. Y los notables escritores en el campo franciscano, histórico y teológico, literario y espiritual, Lázaro Iriarte de Aspurz, CrisantoZudaire, Tarsicio deAzcona, Fidel de Pamplona, Javier deAbárzuza, Crisóstomo de Pamplona, -"Caramba, caram– ba",- Damián de Aoiz, Javier Azcona, Ignacio Larrañaga, Ignacio Rueda, Rufino Grández, Fidel Aizpurúa y un etc. larguísimo. Archivero: Y del buen decir musical, ¿qué?