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LOS DESAFÍOS QUE HOY TIENE PLANTEADOS LA ACCIÓN PASTORAL En las tres largas décadas que han seguido al Vaticano II se han planteado numerosos desafíos a la acción pastoral, que el Concilio no pudo prever o que la Iglesia posconciliar no ha sabido resolver. Obede– cen en gran medida a que estamos viviendo una rápida y profunda transformación cultural, política, económica y social que afecta a la Iglesia, a su estructura y a su misión. Influye, además, el fenómeno de la globalización, a saber, el mundo ya no es la aldea, provincia, región o nación; es todo el universo, el "ecumene" habitado. Sin embargo, recordemos que, como contraste, se dan reivindicaciones nacionalistas de tipo local o exigencias populares de estilo tribal. De una u otra forma estamos enfrentados a un cambio cultural y religioso de enormes propor– ciones, ya que nos toca vivir, no sólo una época de cambios sino un cambio de época. Por eso, al declinar la cristiandad y quedar obsoletas algunas prácticas pastorales preconciliares, le es difícil a la Iglesia inaugurar un nuevo estilo de vida cristiana y llevar a cabo una nueva evangelización. Para estudiar el tema propuesto pondré de relieve algunos desafíos pastorales concretos, tanto del mundo a la Iglesia (1) como dentro de la Iglesia (II). Después recordaré determinados imperativos pastorales que hoy deben ser tenidos en cuenta (III) y señalaré, por último, ciertas opciones teológico-pastorales posconciliares (IV). 55