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Si el silencio se prolonga (sin tener prisa en decidir si este silencio es "demasiado largo") y la desazón en el grupo (o en ti) llega a ser excesiva, puedes pedir a los participantes que comenten este silencio: cómo lo están viviendo, qué resonancias tiene, qué soluciones proponen. Es más difícil dirigir el silencio cuando manifiestaprotesta, rechazo, desconfianza. En estas situaciones, lo veremos mejor a continuación, es necesario hacer expresar y escuchar hasta el fondo las vivencias que están pasando, de modo que todos intervengan. Evita, sin embargo, el escuchar sólo a un participante o, peor, ensañarte en un debate con un participante. 11) Por cualquier cosa que se te diga, no pierdas la gentileza y el respeto. 12) Evita, absolutamente, y tenlo como herida grave a la fraternidad: - entrar en polémica; - estar en silencio o poner entre las cuerdas a alguno con respues- tas u ocurrencias brillantes; - herir o humillar; - aliarte con el más fuerte o con el más consentido; - hacer alusiones a comportamientos o apersonas: si debes decir algo, dilo con claridad en modo directo, prestando atención particular a eventuales desconfianzas o miedos. Es útil ser gentil para prevenir dificultades sucesivas, de modo especial en la fase de actuación. Otros aspectos que se deben aclarar, en el primer el, son las modalidades de proceder: las fechas, los plazos, las modalidades de elaboración del orden del día, las decisiones, etc. 4. Indicaciones para los participantes 11 (de Juan Salonia) 1. No participaren el el con la intención, más o menos explícita, de cambiar a los otros: quedarás totalmente decepcionado. 2. Si estás dispuesto e interesado en comprender más a los 76

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