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Clave CAPITULO VI Nuestra vida en fraternidad Podíamos pensar que es fácil, incluso infantil, hablar de "frater– nidad" y tener un concepto engañoso y equivocado. Esto sucede cuando se piensaen la fraternidad como un introducirse en sociedad para sacar provecho, aun siendo de naturaleza superior al mero interés económico; es decir, vivir juntos para dar y, al mismo tiempo, para recibir colaboración, comprensión, apoyo, afecto y simpatía. El punto débil de esta relación, que podría parecer justa y normal, está en que, lo que uno da en el marco de esta relación, es a sus ojos superior y más precioso de lo que le dan otros, a los que él ha elegido como hermanos. Esta sospecha puede hacerse poco a poco más insistente y llegar a convertirse en la carcoma que roe y destruye este estar juntos en fraternidad puramente humano. Bonheffer lo ha puesto bien claro en su pequeño libro: "La vida común", como se deduce en estas palabras: "El que en su fantas(a se crea una imagen de comunidad, pretende que Dios, el prójimo y uno mismo, sirva para su autorrealización. Entra en la comunidad de los cristianos con pretensiones propias, elige su propia ley y juzga, según ésta, a sus hermanos y al mismo Dios. Asume en la búsqueda delos hermanos una actitud dura y llega a ser un reproche vivo para todos los demás. Actúa como si él fuera el creador de la comunidad cristiana, como si su ideal tuviese que crear la unión entre los hombres. Considera como fallo todo lo que no corresponde a su voluntad. Donde si el ideal falla parece que se destruye la 81