BCCCAP00000000000000000001194

pasar esanoche lejos de casa, dondemi hennana. Pero vi que tampoco allá tendríamucha seguridad y, para no asustarla, cuando estábamos acostán– donos le dije, me voy a pescar. Y salí huyendo para dar tiempo a los huaorani a poder pensar de nuevo, pues cuando sufren mucho sólo tienen tiempo para la ira. Creía yo que el papá de Eugenio habría ya llegado de Kihuaro y tomé ese camino pormás seguro. Cuando al poco me doy de frente con el viejo que venía furioso, annado de lanza y escopeta. Estoy muerto, pensé al instante viendo cómo apretaba su lanza contramí; de haber intentado huir me habría lanceado como a una huangana. El viejo había sido bien amigo mfo y ahora estaba llorando a gritos llenos de ira; ¡por qué ha tenido que morirmi hijo!, él era fuerte, no tenía enfennedad, iba a vivirmuchos años, ¡por qué lo habéis llevado a morir tan lejos de su tierra! Pensé, si le dejo hablar su rabia irá creciendo como el viento y me derribará, así que me puse a aplacarlo, tenía yo mucho miedo. Eugenio ha muerto, le dije, pero eso pasa ala gente, todos duramos poco; yo puedomorir ahora, tú también has de morir, podrías acabar después que yo, nadie sabe cuándo va a suceder eso. De gana hablas, me interrumpió todavía más enojado, pinchándome ya, mi hijo no tenía que morir antes que yo, él tenía que ver cómo yo me hacía viejo y acababa; aunque soy viejo todavía tengo lanza ypuedo vengar su muerte. ¡Voy a sacar la piel de quienes le hicieron mal! No podía escapar, había llegado también su mujer pero ésta no hacía sino lamentarse con quejidos que sonaban muy fuerte en la noche. Yo tengo algo que puede hacerte estar cerca de tu hijo, se me ocurrió decirle; él dejó de llorar y escuchó. Tengo una mochila, una bonita mochila gringa que está bien hecha, no se rompe, ha de durar mucho tiempo. Alguna vez se la presté a Eugenio, a él le gustaba cargarla; yo te la doy y cuando la lleves será como cargar algo de su hijo_contigo. ¿ Unamochila?, respondió primero extrafiado y enseguida encoraginado, ¡cómo voy a llevar eso en vez de mi hijo que podría ayudanne ahora que estoy viejo! Si él hamuerto, sólo quiero lancear, eso calmará mi pena. ¿Por qué los culpables van a vivir mientras yo quedo sin familia? No le mates, dijo entonces lamujer dejando por un momento de gritar, él fue amigo de Eugenio. Al oír el nombre el viejo volvió a llorar pero no 112

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz