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castidad consagrada Une especialmente a Cristo y polariza todo el ser sobre el Absoluto, objeto del Amor del Hermano Mayor. Con estas y otras expresiones que iremos señalando en su momento oportuno, las Constituciones de los Hermanos Menores Capuchinos ponen de manifiesto la apropiación y aceptación total de la doctrina del Vaticano 11, abandonando, de pleno, unas actitudes o situaciones del "pasado" que, en este aspecto, mucho más que en otras cuestiones, provocan una instintiva irritación 11 • La castidad, como excelente don de Dios, abrazada por Cristo, aparece, pues, en las Constituciones de los Capuchinos, conforme con la doctrina del Vaticano II y enrespuesta a los signos de los tiempos 12 , como un instrumento que proporciona una libertad más amplia de corazón por la cual nos unimos a Dios, con amor indiviso, y podemos hacemos todo para todos. Son estas las "nuevas" verdades, examinadas en los puntos uno y dos de la constitución 168 que sigue afirmando en el punto 3: "Debido a este don, fielmente conservado y cultivado siempre, nuestra fraternidad se convierte en signo luminoso del misterio por el que la Iglesia está unida al único Esposo. El carisma del celibato, que no todos pueden comprender, es una opción por el Reino de Dios, anuncia proféticamente dicho Reino en medio de nosotros y ofrece un testimonio de vida futura, en la que los resucitados son hermanos entre sí en presencia de Dios, quien será para ellos todo en todos". La castidad consagrada o el carisma del celibato, descrito en las Constituciones de los Hermanos Menores Capuchinos, aparece también como la imagen y manifestación de la fuerza del amor y fidelidad de la Iglesia a Cristo, como el anuncio del retomo de Cristo en medio de 11 Véase GRÁNDEZ, R.M., o.e., p.263. Escribe en p.264: "El capítulo XI de la Regla franciscana no es ningún himno a la castidad cristiana, ni tampoco ningún elogio a la castidad de los consagrados. Es pura y escuetamente la determinación de tres medidas defensivas en vista de algo: los hermanos no tengan sospechosas compa– ñías de mujeres; los hermanos no entren en monasterios de mujeres, salvo licencia; los hermanos no sean padrinos o compadres". 12 Cfr. AUBRY, o.e., p.240-241: 11 nuovo contesto socio-culturale della virginita consacrata. 86

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