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Propone el punto 2 de la constitución 88: "Al constituir las fraternidades, tanto en casas nuestras como en vivien– das alquiladas, tengan en cuenta la índole personal de los hermanos y las necesidades de la vida y apostolado, para favorecer así el trabajo en común". Se podría hacer la pregunta:¿Cuántos son los hermanos que "trabajan en común"? Todos realizan una misión común... Dejamos de insistir en esta falta de claridad. Recalcamos que se pide a los superiores tener atención a la índole personal y a las necesidadesde la vida y apostolado, para constituir la fraternidad. Se introduce el llamativo inciso, "tanto en nuestras casas como en viviendas alquiladas". No se menciona el número de hermanos necesarios para hacer vida fraterna en común. No se habla ni dice nada, no se distingue entre grandes y pequeñas fraternidades. Sobre éstas se insiste y vuelve, pero en diálogos y encuentros, presentándolas como una aspiración o meta a alcanzar, ya que en ellas, se afirma, es más posible que se dé el espíritu de familia y cercanía. El punto 3 de la constitución 88, al mismo tiempo que anima a la apertura de nuestras casas 76 , pide moderación en el permiso de entrada a las mismas. Se usa la expresión casas o viviendas. Así es la formulación del punto 3 de la constitución 88: "Facilitando el acceso a nuestras casas o viviendas, modérese la entrada de personas extrañas con tal prudencia y discreción que se conserve el ambiente propio para la intimidad, la oración y el estudio". El punto 3 queda completado con el 8, donde se dice: y Robert C. Williams: "Mi interpretación de la Iglesia se aproxima, aunque difiera de ella principalmente en cuanto a la inclusión de la vida no humana: 'Ecclesia' es un modo trasfigurado de comunidad humana que incluye una pluralidad de pueblos y tradiciones culturales, fundamentada en la vida, muerte y resurrección de Cristo, constituida por la presencia redentora de Dios como Espíritu, en la que se superan los modelos de existencia privatizados, provincianos y jerárquicos y en la que se actualiza el amor reconciliador universal que libera del pecado, la alienación y la opresión" (HOGDSON/WILLIAMS, "The Church ", en Christian Theology, p.271 )". 76 Se vuelve sobre este argumento en la constitución siguiente, 89, que lleva por título, casualmente: Acogida en nuestras casas. 5 1