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les invita, concretamente, en el punto 1 de la constitución 81, a sentirse bien dentro de la sociedad del trabajo, pero también del ocio, y a gozar del tiempo libre y del descanso, en orden a ser y encontrarse a sí mismos. No lo dice así expresamente, si bien se deduce o sobreentiende en las frases que hablan de reponer las fuerzas y de mirar a fomentar las relaciones fraternas 42 • La constitución 81, después de haber destacado que la recreación debe servir al fomento del valor y realidad de la fraternidad, ilumina un aspecto de carácter más general, muy propio de nuestra cultura del trabajo y del ocio. Hace referencia a la necesidad de emplear el descanso, oportunamen– te, para distracción del ánimo, pero, sobre todo, para consolidar la salud del espíritu 43 • El lenguaje usado responde y, tal vez, evoca el del Manual Seráfico y no tanto el que está más conforme con los nuevos tiempos. Se habla aún de recreaciones especiales, aunque también se usa la expresión, vacacio– nes. "Recreación y vacaciones que han de tomarse de manera conveniente a nuestro estado de Hermanos Menores", es el consejo del segundo punto de esta constitución 81 que se entretiene en "particularizar" un material que no es tan siquiera propio de las Ordenaciones. Valor del tiempo ( constitución 82) La constitución 82, número final y conclusivo del capítulo V, "Modo de trabajar", trae una preciosa exhortación sobre la importancia del tiempo. De manera que, si acertadas han estado las Constituciones, al recordar en el número 75,3 la feliz expresión de la Regla: los hermanos trabajen fiel y devotamente, no han podido estar más acertadas al elaborar un texto, fundamental y profundamente espiritual. Radicalmente orien– tativo. Dice el punto 1 de la constitución: 42 Cfr. AA.VV ., Le constituzioni cappuccine rinnovate, o.e., p.121-122 43 Cfr. Gaudium et spes, 61. Véase el número 67 3 1