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elección por parte de Jesús de una vida pobre responde a una actitud de confianza con el Padre que alimenta las aves del cielo y viste los campos de flores (Mt 6,25-34) y a la voluntad de contar con la mayor libertad posible para dedicarse a la propia misión. La pobreza de Jesús ha asumido otras formas. Así, en el cumplimiento de su obra mesiánica, ha rechazado constantemente la tentación del prestigio, del poder, del dominio, etc. Ha convivido con los pobres de todo género y les ha anunciado el Reino. Los ha preferido 40 • A la luz de los cambios socio-económicos de nuestro tiempo y de los avances de la teología espiritual franciscana que descubre nuevos y distintos matices en este tema, examinamos, sin rubor, nos gustaría hacerlo sin ligereza, las valoraciones teológicas y las concreciones dispo– sitivas contenidas en este capítulo IV de las Constituciones de los Hermanos Menores Capuchinos, enunciado bajo el título de "Nuestra vida de pobreza". Habrá que tener la sinceridad de reconocer que la pobreza, provoca– ción al materialismo ávido de poseer, mejor dicho, ciertas expresiones culturales que insistían e insisten en la pobreza material, han podido ser la piedra donde han tropezado, durante siete siglos el franciscanismo y durante cuatro el franciscanismo capuchino, en particular nuestro capítu- 40 Véase MAGGIONI,B., JI fondamento evangelico della vita consacrata, en Vita consacrata. Un dono a/la Chiesa, o.e., donde escribe respecto al rechazo por parte de Cristo de la tentación del poder: "Fu una tentazione che lo accompagnó tutta la vita, proveniente da Satana (Mt 4, 1- 11 ), dalle folle (Gv 6, 15), dagli scribi e dai farisei (Me 8, 11; 15,31-32), e persino dagli stessi discepoli (Me 8,32-33). Gesu oppose aquesta tentazione almeno due ragioni. Anzitutto, la ferma fiducia nella Parola di Dio che apparentemente sembra debole (al punto che gli uomini sono sempre stati tentati di rafforzarla), mache in realta e forte. Gesu non e caduto nell'equivoco di introdurre nella debolezza di Dio la forza della potenza degli uomini. E poi la lucida percezione che denaro, potenza e dominio non si lasciano ridurre a strumenti: ben presto si trasformano in padroni, ed esigono adorazione. Cosi dice, e giustamente, Satana ne! deserto: "Tutto questo ti daró, se mi adorerai". Gesu hafrequentato i poveri di ogni genere e a loro ha annunciato il Regno. Li ha privilegiati. E questo uno dei tratti piu storicamente sicuri del suo ministero. La ragione di questo privilegio non va cercata nelle disposizioni spirituali dei poveri, ma nella carita e ne! desiderio di giustizia che Dio ha verso di loro". 100

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