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sencilla y profundamente religiosa de La Rioja. El primer destino de los tres religiosos fue Chepes; Francisco llega allí el 31 de julio de 1969. De allí se extienden a otros lugares: Marcelino marcha a Ulapes (250 hs., a 70 km. de Chepes), permane– ciendo Francisco y Eduardo en Chepes. Durante el año que permanecie– ron juntos, Francisco se dedicaba a evangelizar el pueblo, mientras Eduardo misionaba en las sierras. Francisco se preocupaba del bien espiritual, pero también de la promoción social de Chepes. Instaló un comedor parroquial para paliar necesidades urgentes; se preocupó de llevar el agua, indispensable, de Chepes Viejo, y logró que el municipio se hiciera cargo de esta necesi– dad; se preocupó de los ferroviarios y promovió el adelanto del pueblo en todo sentido. Al acabar ese año, Eduardo se trasladaba a Desiderio Tello (400 hs.), con intención de ubicarse allí. Comenzó por pintar la casa, construir el aljibe y hacer otros arreglos, cuando ocurre el fallecimiento del cura de Olta, Pbro. Antonio Conrero (17-4-1970). Este, párroco durante 39 afíos en Olta, con los padres Jaramillo (en Chepes) y Golbach (50 afíos en Tama) fueron, antes de llegarlos Capuchinos, los grandes misioneros de Los Llanos. Vacante la parroquia de Olta, Eduardo es elegido por el presbiterio para ocupar el lugar de Conrero en el hermoso y apacible pueblo del Chacho Pefíaloza, tomando posesión el 17 de mayo de 1970. En julio de ese afio (31-7-1970) el padre José Brans escribía desde La Eufemia (Mar del Sur) a Mons. Angelelli, quien le ofrecía la parroquia de ElMilagro, tomando posesión de lamisma el 6 de septiembre de 1970. Estaba en ese momento de Vicecomisario el padre Ramón Guirao, por ausencia del Comisario, a la sazón en Roma. El padre Marcelino permaneció en Ulapes hasta el año 1978; el padre Francisco se trasladaba en 1975 a Milagro con José Brans, quedando en Chepes el Pbro. Ceferino Miazzi, quien ya residía allí con Miguel La Civita; más tarde se les uniría el hermano Antonio Puigjané. 61