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Capítulo de la Provincia Argentina aprobaba a su vez dicha resolución, afinnando: "El Capítulo ve con agrado una futura unión entre dichos Comisariatos" (convertidos ya en Provincias). Así las cosas, se siguió trabajando con la mística de llegar a ser una sola Provincia. Hoy día ya hay un "proyecto de unión" que, si bien no tiene plazos ineluctables, sí tiene como metas más o menos cercanas: una sola fonnación, una sola misión, un solo gobierno. Para esto se intensifican las reuniones conjuntas de Definitorios y se van dando pasos cada vez más concretos. Expansión de la Orden en Argentina La expansión de la Orden Capuchina en Argentina se fue dando-paso a paso, debido a circunstancias diversas y, a veces, más bienfortuitas, sin un proyecto unificador. El elemento que las unía yel proyecto estabanmás bien en el carácter de "misión" que tenían nuestras casas, dedicadas, en general, a un apostolado del pueblo, apoyado casi siempre en una estruc– tura parroquial yorientado a la evangelización mediante la predicación y, en la medida de lo posible, en las misiones populares. Este carácter misionero se distinguió, no obstante, en unas casas más que en otras, debido a las circunstancias y al personal de cada una. Los lugares de fundación fueron más bien marginales, aunque con el correr del tiempo fueron absorbidos por el progreso y englobados en barrios prósperos. Euskal-Echea La primera fundación posterior a la de Nueva Pompeya quedó fuera de este esquema misionero. Explican este hecho las circunstancias de su fundación. Por presión de la sociedad vasca Euskal-Echea, de Buenos Aires, sobre el padre Joaquín de Llevaneras, fundador del Colegio de Lekároz de Navarra y, a través de éste, sobre los Superiores de la Provincia Capuchina, se fundaba en Llavallol el colegio del mismo nombre de la sociedad, con carácter de escuela agraria para los hijos de las familias vascas diseminadas en el campo argentino. Corría el afio 1908. 32

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