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comenzó a emerger en aquella lóbrega planicie. Viendo el padre Brogi que solo no podría llevar adelante el proyecto de la iglesia y de un colegio para níflos pobres, a través de una de las Damas invitó a los Religiosos Capuchinos que trabajaban en Montevi– deo a hacerse cargo de la nueva fundación. Estos Capuchinos eran italianos y formaban una Misión dependiente de la Provincia Capuchina de Génova. Es de notar que en la zona vivían muchos inmigrantes italianos. Los Religiosos aceptaron gustosos la oferta de una iglesia, un conventito yla obligación de atender espiritualmente a la gente obrera de los contornos. Estando las obras en construcción, llegaron los Capuchinos en marzo de 1898 y se instalaron en la parte del convento ya habilitada. Los religiosos destinados a la nueva fundación eran: - Padre Damián de Finalborgo, - Padre Querubín de Ceriana, - Hermano Juan Bautista de Molassana. La iglesia de Ntra. Sra. del Rosario de Nueva Pompeya, como ya se la llamaba, fue inaugurada solemnemente el día 29 de junio de 1900, fiesta de los Apóstoles San Pedro y San Pablo. La bendición del templo estuvo a cargo de Mons. Duprat, Vicario Capitular de la Arquidiócesis, estando la sede vacante por el fallecimiento del Arzobispo Mons. Uladislao Castellano. Ofició la misa cantada el padre José de Génova, Provincial de los Capuchinos, con la presencia del internuncio de S.S. León XIII, Mons. Antonio Sabatucci, recientemente llegado a Argenti– na. El pueblo estuvo presente, aunque con "una discreta concurrencia", dado el mal tiempo y lo alejado del barrio de la ciudad. El 8 de diciembre de 1896 se había puesto la piedra fundamental del colegio de niños, el cual fue inaugurado el 7 de marzo de 1898 "con unos cuantos pupilos, medio pupilos y muchos externos". El primer director fue el padre Damián de Finalborgo. 14