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264 TARSICIO DE AZCONA rídica. Isabel consignó a sus dos hombres de confianza, Fernando de Tala– vera, prior de Prado, y a Juan Manuel, Medina del Campo, 15 de octubre de 1480, una importante instrucción para la profesión de Juana: había entrado por su voluntad en las clarisas y el año de noviciado se cumplía el 5 de no– viembre de 1480. Debía profesar en los diez días siguientes. Les enviaba para que garantizasen la canonicidad de la profesión, hasta en sus últimos requi– sitos. Caso de no profesar, debían requerir al rey de Portugal para que la me– tiese en tercería, y con ella todas las escrituras que ella o personas de Cas– tilla tuviesen referentes a la sucesión 27 . Ambos procuradores iban también provistos de las escrituras que les había entregado el secretario Fernando Alvarez de Toledo, entre ellas el tes– timonio que "truxo Cárdenas de quando tomó el ábito doña Juana" 28 . Lleva– ban numerosas cartas de creencia para la corte y los nobles. Este bloque de escrituras fue recibido por Talavera, que firmó el recibo: "Indignus Prior de Prado" 29 . Imposible describir en este momento el real monasterio de Santa Clara do Arrabalde de Coimbra, elevado y santificado por la Reina Santa, Isabel de Portugal. Se trata de Santa Clara la Velha, edificado a las orillas del río Mondego que con sus avenidas obligó en 1646 a trasladarlo a la colina, aban– donando el antiguo solar y llevando al nuevo, a Santa Clara la Nova, numero– sos recuerdos del anterior. Entre tales recuerdos llevaron su rico archivo, que en parte, sólo en parte, se conserva en el Archivo de la Universidad de Coim– bra 30 . Una visita detenida a San Clara la Nova orienta para suponer con verosimilitud cómo sería el habitat de Santa Clara la Velha 31 . Gracias a al– gunas actas capitulares de principio del siglo XVI se puede rehacer la familia conventual, presidida por la abadesa Sor María de Meneses, testigo clave en la vida de Juana, pues su último acto data del 23 de noviembre de 1529. 2 7 Instrucción de suma importancia para tener maniatada siempre a su contrincante, en LA TORRE - SUAREZ, II, 90-93, aunque preferimos el original de AGS, PR, 90-93; conocida por SITGES, 335-8. 28 AGS, PR, 49-75. El texto de este testimonio no ha aparecido entre los papeles de Simancas, no obstante su importancia. 29 Aparece esta firma al final del documento citado en la nota anterior. La reproducen LA TORRE - SUAREZ, II, 94. 30 Agradecemos al Sr. Director de dicho Archivo, Dr. Manuel Augusto Rodríguez las orienta– ciones para estudiar dicho fondo. Conserva 157 libros entre 1515-1866; sobresale el Inventario del monasterio, indispensable para rehacer la historia social y económica. Existen fondos esparcidos por otros archivos. Puede verse TOMAS DE FONSECA, Santa Clara a-velha de Coimbra, Coim- • bra, 1926; SANTOS CONCEIQÁO, A., Santa Clara de Coimbra na arte, na Zenda, na poesía , Coimbra, 1954. 31 Iglesia, coro alto y bajo, claustro, dependencias, todo de gran monumentalidad. Algunas actas capitulares del siglo XVI ayudan a rehacer, al menos en parte, los nombres de la comuni– dad.