BCCCAP00000000000000000001161

136 SATURNINO ARA 2.2. La Regla de Santa Clara y su interpretación hoy Cuando los miembros de la Primera Orden emprendieron la tarea de reno– vación de la propia legislación, por los años de 1966-1969, tras la publicación del Motu proprio Ecclesiae Sanctae -6 de agosto de 1966-, los mismos sintie– ron la necesidad de dirigirse a la Santa Sede para pedir la intervención del Santo Padre. Suplicaban se dignase acoger la propuesta de que los capítulos generales contaran con la facultad de ofrecer a los hermanos una interpreta– ción religiosa y espiritual, doctrinal y apostólica de la Regla de San Francisco, teniendo en cuenta las exigencias de los tiempos y de la unidad de los religio– sos esparcidos por todo el mundo, pendientes de dicha interpretación y de su aprobación por la autoridad eclesiástica. · La respuesta, de fecha de 21 de febrero de 1969, por parte de la entonces Sagrada Congregación para los religiosos e institutos seculares, dirigida al ministro general de la OFM, Constantino Kosser, firmada por el cardenal An– toniutti, recomendaba el entendimiento de los ministros generales de los me– nores conventuales, de los menores observantes y de los menores capuchinos en orden a estudiar por un grupo de expertos cualificados de las tres órdenes los siguientes y concretos puntos: l. La interpretación auténtica de la Regla de San Francisco. 2. La pobreza. El grupo fue constituido de inmediato, de forma que durante diversas se– siones de estudio, realizadas en marzo-mayo de 1969, presentaron sus conclu– siones. Comunicadas éstas oportunamente con la Sede Apostólica mediante los escritos de 15 de julio de 1969 y de 18 de febrero de 1970, dieron origen a una respuesta de la Congregación en orden a la interpretación de la Regla Bulada. Respuesta que, tantas veces, es desconocida, y por ello mismo poco valorada por los hermanos. No estaría de más que las hermanas de la Segunda Orden estudiaran por su cuenta las cuestiones e interrogantes que les presenta la vida frente a la Regla de Santa Clara y tomaran luego, después de un diálogo con la Congre– gación, buena conciencia de la vigencia, no digo jurídica, sino vivencial, y de la actualidad de esa serie de prescripciones que responden a una "carga" de espiritualidad, necesitada hoy de distintos cauces de expresión, para que pueda ser auténtica propuesta vivencia! y de actualidad. 2.3. Los problemas más actuales, necesitados de acomodación La Regla que Clara de Asís compuso en los últimos años de su vida para las hermanas presentes y futuras llegó a buen término a través de un largo y