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el pastar y en maltrarar a las personas. El fundador y visitador le aplicó el capí– tulo 12 de los Estatutos y depuso a su hija del cargo de rectora. Pero sucedió lo inesperado. Cuando el día 25 de agsto compareció el notario para intimarle jurídicamente la destitución,La interesada «resondióy dixo que en la dicha revocación no consentía ni consintió, por quanto dize que las personas de quie– nes se tomó la información son sobornadas y que falsamente han informado de lo que han dicho della». 10 Estas palabras hacen sospechar que sus herma– nas tiraron la piedra, pero escondieron la mano, incitando a actuar a otras per– sonas, colegialas o sirvientas. 10. De la destitución de la rectora a la disolución del Colegio pasaron sólo breves horas. El mismo día 22 de agosto de 1539, ante las colegialas pre– sentes, el fundad-::ir rehizo la marcha del Colegio, <<y en tiempo de diez añyos no solamente no ha aumentado en bienes temporales ni en personnas... ,mas aún nunca se ha podido instituir y fundar el dote designado para la perpetui– dad de dicho Collegio, ni a hauida aparejo para recebir otras collegiales». Hacían constar que no podían cumplir con dignidad el rezo de las horas canó– nicas, ni los oficios de la casa, por no hacer colegialas «como por no hauer entre las dos her::nanas la conformidad que conuernía», haber muerto su her– mana Isabel y vivir desasosegada su sobrina. Reconocían que no estaban suje– tas a voto alguno y quedaban en manos de su padre y dos primos suyos, Gaspar de Reus, señor de Luceni y Juan de Reus, señor de Ribas y malexar, ante quienes consentía en que «el dicho Collegio sia disoluido y totalmente desecho y nosotras quedemos libres de la obseruancia de la dicha congrega– ción». Ante esta actitud, el fundador Villasimpliz disolvió el Colegio. 11 11. Las hijas no quedaban a la intemperie, sin techo ni sin mesa, pero sí muy desvalidas y sin consentimiento entre ellas. Su padre quiso remediar su situación económica y el 15 de enero de 1540 gestionó a través del protonota– rio Miguel Climent que el emperador aceptase su renuncia a los peajes de las tres caballizas que poseís por merced en Barbastro, san Esteban de la l<itera y Bielsa y que las concediese a sus dos hijas Ana y Aldonza y a su sobrina Lucrecia estanya, alias González. pocos días después, e fundador recibió en comanda del mercader Bartolomé Pequo 5.000 sueldos dineros jaqueses, poni– nedo como gara::itía las casas del Colegio. 12 Como del árbol cortado todos 1 1 hacen leña, Juan Luis, el hermano de las colegialas, consiguió de su padre las 1 • casas destinadas a Colegio. 13 Pensamos que se trató de un acto de violencia del ! 10 Este importante documento en ANZ Juan de Arruego leg. 377 ff.41 lr-412v. 11 Esta acta notarial t1n importante en ANZ Juan de Arruego leg. 377 ff.475r-478v. 12 ANZ Juan de Arruego leg. 379 ff.33v-34v. 13 ANZ Juan de Arruego leg. 379 ff.223r-225r. 61