BCCCAP00000000000000000001137

Constituciones capuchinas de 1575 259 Pcr la misma ley son denunciados como excomulgados los apósta– tas de la religión (n. 89; n. 99a). Con respecto a las penas, tanto con– tra éstos cuanto contra otros delincuentes, las constituciones de 1536 y 1552 advierten que los vicarios generales y provinciales sopesen la cuantía del pecado, la humildad del reo y la caritativa discreción, según los antiguos estatutos 104 , especialmente los de Guillermo Fari– ner (añaden las de 1552) 105 , y conforme a las laudables costumbres de la orden 106 • Nuestro texto omite estas últimas recomendaciones. En su lugar propone algunos párrafos totalmente nuevos, prolongando bastante el capitulo séptimo, que resulta extraordinariamente largo en el con– junto de la legislación capuchina posterior. En ellos se establecen penas contra: los apóstatas que tornan al siglo, sea que lo hagan por un mes o por mayor duración ( n. 90); los religiosos que abandonan la orden y toman el hábito de otra familia (n. 91 ); los que vagan sin obediencia fuera de la provincia (n. 92) 107 o dentro de la misma de 1536.. El catálogo napolitano de los primeros superiores de la orden nos ofrece una noticia al respecto: « Sotto questo Generale [Jerónimo de Montefiore, 1575-158:J medemamente si cominciorno a far delle Carcere, perché prima poche ve ne e:::ano)) (MELCHIORRE DA P0BLADURA, Un catalogo inedito dei XV o XVI primi superio:-i generali dei minori cappuccini, en Collectanea franciscana 8 [1938] 78). 104 Sobre las ediciones de las constituciones generales antiguas de la orden franciscana véanse, entre otros, los siguientes estudios: MARINUS A NEUKIRCHEN, OFMCa:;,., De capitulo generali in primo ordine seraphico, Romae 1952, p. 508-522; A. BAREAD0, OFM, De commissariis generalibus in ordine fratrum minorum, Hispali 1952, p. XVII-XXIV; P.D.M, BERTINATO, OFM; De religiosa iuventutis insti– tutione in ordine fratrum minorum, Romae 1954, p. 157-161; E. WAGNER, OFM, Historia constitutionum generalium ordinis fratrum minorum, Romae 1954, p. 171-175 , cf. Miscellanea francescana 57 [1957] 133-136); M. BRLEK, OFM, De historia fontiun-. et institutorum ordinis fratrum minorum, en Antonianum 31 (1956) 83-91; M. CASTRO. OFM, Estudio bibliográfico de las constituciones franciscanas, generales y provinciales, en Archivo ibero-americano 24 (1964) 241-304. 105 Cf. M. BIHL, OFM, Statuta generalia ordinis edita in capitulo generali an. 1354 Assisii celebrato communiter farineriana appellata, en Archivum franci– scanum historicum 35 (1942) 35-112. 177-253 (estudio crítico y edición excelentes). Influyeron grandemente en los célebres estatutos generales de Barcelona (Cf. M. BmL, Quibus in adiunctus statuta. generalia fratrum minorum observantium ultramcntanorum Barcinonae an. 1451 compzlata sint, en Archivum franciscanum historiC'.,tm 38 [1945] 3-39; ID., Statuta generalia observantium ultramontanorum an. 145! Barcinonae condita, en Archivum franciscanum historicum 38 [1945] 106-197). 106 Véase la nota 100. 107 Lag, constituciones de 1536 dicen: « Item ordinamo che nessuno Frate fu– gitivo é.e una Provincia sia acceptato in un altra, senza licentia in scriptis del Padre Vicario generale. Et facendosi altramente la sua receptione sia nulla, et il recip~ente sia gravamente [!] punito, ad arbitrio di esso Padre Vicario gene– rale » (Const. 1536, n. 131). Lo mismo prescriben las de 1552 (n. 131).