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56 Saturnino Ara participar más directamente en la pastoral de la Iglesia y de la realización de tareas sin que se le haga caer dentro de una especie de espiral de clericalización. El examen de estas cuestiones demuestra buena voluntad. Re– fleja también un cierto desconocimiénto de la teología y en particular del derecho, conceptuado como instrumento al servicio de la vida y del momento actual. La vida femenina vive sus problemas, se siente ligada, no digo pendiente, de un buen servicio sacerdotal y jerárquico, pero sin la «complicación» de quienes, deseando una mayor autonomía frente a la jerarquía, se han constituido a modo de « iglesia personal», y reciben los servicios sacerdotales de los hermanos clérigos miem– bros del instituto. La clericalización de los monjes fué un hecho que nadie niega. No se estará de acuerdo en las razones que justifican el hecho. Una explicación la podríamos encontrar en la necesidad de culto y sacra– mentalización dentro del grupo. Las Ordenes mendicantes nacieron, providencialmente, bajo el signo de la hermandad de sacerdotes y laicos, todos los cuales se consagraban aunadamente a la labor de inculturación en el evangelio de una sociedad o cultura naciente, de unos centros que dejaban de ser agrícolas y pasaban a ser urbanos y apostaban por el comercio y la comunicación entre los pueblos. Los institutos, llamados de clérigos regulares, tienen su origen cuando las relaciones entre laicos y clérigos aparecen consolidadas. Se acepta la distinción entre religioso sacerdote y religioso laico, con la misma normalidad con la que la sociedad acepta tantas otras categorías sociales 45 ; no obstante y a pesar de que en el fondo se siente la necesidad de una igualdad y de una. cierta equiparación. La prueba la tenemos en los muchos escritos y debates del tiempo en torno al sacerdocio como estado de vida con valor peculiar respecto al estado de vida consagrada. 45 « Un corps social, comme un institut religieux et, dans cet institut, les membres laícs et prétres, entrent en erise quand, par example, les normes et les valeaurs ne s'harmonisent plus entre elles; quando la structure gene les finalites; quand les valeurs économiques sont en contradiction avec les valeurs morales et religieuses; quand les expressions culturelles de ses valeurs changent ». MIDALI M., Identité des religieux dans les instituts clericaux, en Les fréres dans nos instituts, o.e., pag. 27.