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CANTANDO EN TIEMPOS OSCUROS 487 logrado erradicar este sueño del alma de la sociedad. «La existen– cia de exclusiones, con todos sus satélites de pobrezas y marginali– dades, marca la altura moral de nuestro tiempo y plantea en toda su radicalidad la principal cuestión ética que abre el milenio: dón– de dormirán los excluidos?, ¿qué será de ellos? Plantea, asimismo, la gran cuestión política, ya que vivir humanamente es ampliar el nosotros humano y hacer recular los espacios de marginalidad; e incluso plantea la gran cuestión religiosa, ya que el problema teo– lógico más radical hoy es cómo anunciar a los excluidos que Dios los ama: ¿quién y dónde podrá alimentar su esperanza?, ¿qué mesa podrá acogerlos como comensales? (J. GARCÍA RocA, En tránsito, pp. 171-172). Esta espiritualidad de la inclusión conecta perfectamente con el perfil y las actuaciones de Jesús de Nazaret. En Me 3,3 se dice al hombre del brazo atrofiado: «Levántate y ponte en medio». El excluido por su nula productividad no solamente es reintegrado al grupo, a la mesa común, sino que se le «pone en medio». Es decir, el excluido pasa de su marginalidad al núcleo de la sociedad. Ése es el gran sueño por el que Jesús ha vivido y soñado. ¿Puede pensarse una «ciudad nueva>• en términos de exclusión, de elitismo, de pro– piedad privada y privatizada? Sería impensable. 3. La bondad: ¿un ideal desterrado? Desde las siete cartas que abren el texto de Apocalipsis (Ap 3,2) hasta la visión final que lo cierra (Ap 21,27) el vidente tiene claro que en la nueva cirdad no habrá sitio para aquellos a quienes la religión (la propia) o la moral (también la propia) considera malos. Por eso, la ciudad nueva está destinada, de alguna forma, a la élite, a los «perfectos». Quien no lo es, quedaría excluido. Tal visión dimana de la sempiterna clasificación de las perso– nas en el simple pero férreo esquema buenos-malos. Pero resulta que la vida demuestra que los buenos no son tan buenos como ellos lo dicen y los malos no son tan malos como se dice. Habría que tener otro tipo de valoración. Podría ser aquel que, dependiendo de