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194 FIDEL AIZPURUA, OFM CAP pira y orientan lo cristiano (Palabra, sacramentos, orac1on, etc.) y el segundo se refiere al situar en el hoy social la inspiración cap– tada por el Mensaje. El primero sin el segundo corre el riesgo de un fanático iluminismo. El segundo si1D1 el primero corre el riesgo de hacer perder la orientación cristiana al concreto estilo de vida del creyente. Ambos son elementos integrantes de lo cristiano en una u otra medida (según lo peculiar de cada vocación). Pues bien, la profecía, tanto en1 la persona de Jesús, como en, el resto del NT (y en la vida misma del creyente de hoy) se articula y engarza en torno a esta doble estructura. De ahí que nuestro aná– lisis se efectúe sobre todo en hase a .estos dos componentes de lo cristiano: veremos cómo Jesús y la comunidad ejercen la profecía en lo místico y en lo político de la fe. Desd~ ahí sería preciso leer lo profético en nuestra vida de hoy. 2. DESDE EL MENSAJE DEL NT Dado que el tema de lo profético e,s tan deslizante y tan plural, nuestro análisis tratará de ceñirse lo más posible a los textos del NT. Es justamente el Mensaje el garante de la comprensión co– rrecta de lo cristiano 2 • Por ello entendemos lo profético como algo orientado y ceñido a la persona del Jesús del Evangelio. Lo plural de la profecía del AT ha encontrado, en Jesús no solamente síntesis, sino definitividad. Este derrotm-o será el que tomará siempre el cristiano cuando quiera entender lo profético en su ideología y en los correspondientes estilos de vida. En el fondo, la profecía desvela y apunta a la construcción y vivencia de la fe en Jesús 3 • 3. DESDE UNA ESCATOLOGIA «HISTORICA» Lo profético apunta hacia una plenitud que, al límite, será plena en el día final del triunfo total de Jesús sobre el cosmos. 2 Como en Hech 13,5h. Juan Marcos es garante de la corrección de la le pri– mitiva por su cercanía al hecho de Jesús. Cf. J. Ru1z-CAMPS, El camino de Pablo a la misión de los paganos, Madrid 1984, pp. 43. 84. 3 En este sentido podría hablarse de una «cristología de lo profético».