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396 FIDEL AIZPURÚA DONAZAR los humanos nos une la limitación y que, desde esa limitación asumida, se puede entablar vínculos de afecto, de vida, de re– lación. Es este «pacto entre derrotados» del que puede surgir la ternura más elemental. De ahí brotará imparable la huma– nidad y, con ella, el bálsamo del amparo 42 . 3. Lectura social Una percepción amplia del texto de 1 Pe y sus ideas funda– mentales deriva, con cierta facilidad, en interrogantes sociales que hoy atraviesan la vida de nuestra comunidad humana. Desde ahí puede surgir también alguna luz para Ectuaciones sociales de más calado humano y creyente. 1) Defensa del hogar: La sociedad de hoy está metida en impor– tantes batallas: la defensa de la familia, la defensa del derecho a una vivienda digna, etc. Tal vez iaya que pensar que lo im– portante es defender el hogar, las relaciones que se establecen en el ámbito cercano de las personas. ¿Para qué se quiere una familia como simple estructura so~ial que plantea más inter– rogantes que soluciones a las demandas del interior de la per– sona?43 ¿Para qué se quiere una vivienda cómoda y cálida si lo que de verdad reconforta es la buena relación con el otro? La su proyecto. Al hacerlo, le otorga su «ser objeto», algo que aquél no lograría sin su mediación. El sujeto, al sentirse observado, se siente mero objeto, se siente «degra– dado, dependiente y fijo», y ello le provoca vergüenza. No sólo es un ser «para sí», es también un ser «para otro» que lo convierte er un ser «en sÍ». 42 «Les propongo entonces, con la gravedad de las palabras finales de la vida, que nos abracemos en un compromiso: salgamos a los espacios abiertos, arries– guémonos por el otro, esperemos, con quien extiende sus brazos, que una nueva ola de la historia nos levante. Quizá ya lo están haciendo, de un modo silencioso y subterráneo, como los brotes que laten bajo les tierras del invierno. Algo por lo que todavía vale la pena sufrir y morir, una comunión entre hombres, aquel pacto entre derrotados. Una sola torre, sí, pero refulgente e indestructible»: E. SÁBATO, Antes del fin, Barcelona 1999, 187. 43 Cf V. NAVARRO, Bienestar insuficiente, democracia incompleta, Barcelona 2002, 52-62.