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15 HECHOS DE LOS APÓSTOLES ha curado; la fe que de él viene le ha concedido la salud perfecta en vuestra presencia. 17 Ahora bien, hermanos, ya sé que habéis obrado por ignorancia, lo mismo que vues– tros jefes. 18 Pero de este modo Dios ha cumplido lo que había anunciado por boca de todos los profetas, a saber, que el Mesías había de padecer. 19 Haced penitencia, pues, y convertíos para que se perdonen vuestros pecados, 2 º y el Señor envíe los tiempos del consuelo y mande a aquel que os está destinado, a Cristo Jesús. 21 El debe quedarse en los cielos hasta la restauración de todas las cosas, de la que Dios habló desde antiguo por boca de sus santos profetas. 22 Moisés, en efecto, dijo: El Señor, Dios nuestro, os sus– citará de entre vuestros hermanos un profeta como yo; le escucharéis en todo cuanto os diga *. 23 Quien no escuchare a este profeta será eliminado del pueblo. 24 Todos los pro– fetas que hablaron desde Samuel en adelante anunciaron estos días*. 26 Vosotros sois los hijos de los profetas y de la alianza que concertó Dios con vuestros padres cuando dijo a Abraham: Y en tu descendencia serán bendecidas todas las naciones de la tierra *. 26 Para vosotros en primer lugar ha resucitado Dios a su siervo y lo ha enviado para bendeciros, apartándoos a todos de vuestras iniquidades *. Prisión de Pedro y Juan 4 Mientras ellos hablaban al pueblo, se personaron los sacerdotes, el prefecto del templo y los saduceos *, 2 contrariados porque enseñaban al pueblo y anunciaban en 22 Dt 18, 15-19. 24 Los primeros predicadores ponen de manifiesto que Jesús realiza las profecías del Antiguo Testamento a través de su descencia davídica (2, 30 13, 34) de su categoría de profeta, sucesor de Moisés (3, 22 ss.), de sus padecimientos (2, 23), de su resurrección (2, 25-31; 13, 33-37) y de su exaltación junto a Dios (2, 34). 25 Gn 22, 18. 20 El pueblo judío, depositario de las promesas y de las bendicio– nes, tiene preferencia en los designios salvlficos de Dios. Se insiste cons– tantemente en la necesidad de la conversión para percibir los bienes del nuevo Reino, 1 El libro de los Hechos presenta sistemáticamente a los saduceos como enemigos de la Resurrección (23, li-8). El 11«1tagonismo entre sa– duceos y fariseos favorecerá más de una v&E la causa cristiana (5,34; 23, 8-9; 26, 5-8).

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