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HECHOS DE LOS APÓSTOLES 10 el precio de la iniquidad; habiendo caído de bruces y re– ventado por la mitad, se esparcieron todas sus vísceras. 19 El caso fue tan conocido entre todos los habitantes de Jerusalén que este campo fue llamado en su lengua "Hacel– dama", que quiere decir campo de, sangre. 20 De hecho está escrito en el libro de los Salmos: Quédese desierta su mo– rada, que nadie habite en ella.' Y además: Que otro ocupe su cargo *. 21 Urge, pues, que uno de aquelios que han an– dado en nuestra compañía durante todo el tiempo que Je– sús, el Señor, vivió entre nosotros "', 22 .es decir, desde el bautismo de Juan hasta el día en que nos fue arrebatado, sea elegido para que, junto con nosotros, sea testigo de su resurrección *. 23 Y presentaron a dos : A José, llamado Barsabás, por sobrenombre Justo, y a Matías. 24 Y oraron así: Tú, Señor, que conoces los corazones de todos, mués– tranos a cuál de estos dos has elegido, 25 para ocupar,. en el ministerio del apostolado, el puesto que abandonó Ju– das para irse a su lugar. 26 Echaron a suertes, y la suerte tocó a Matías que quedó agregado a los once apóstoles. Venida cfel Espíritu Santo en Pentecostés 2 Cuando lleg6 el día de Pentecostés estaban todos reu- nidos eii el mismo lugar *. 2 Y de repente se produjo un ruido que venía del cielo, como de v.iento que sopla con violencia y llenó toda la casa donde estaban congregados. 3 Y se les aparecieron unas lenguas como de fuegó que, repartiéndose, se posaron sobre cada uno de ellos. 4 Todos quedaron llenos del Espíritu Santo y comenzaron a hablar 20 SI 69, 26; 109, 8. 21-22 San Pedro anuncia las condiciones necesarias para ser apóstol : que ha¡ya seguido -a Cristo durante su vida pública y haya sido testigo de su Resurrección. La Resurrección tiene una importancia fundamental, por 0 que es prueba contundente de la divinidad de Jesús 'y garantía de nues– tra redención. La Resurrección manifiesta que .el Padre ha aceptado el sacrificio y que la muerte y el pecado han sido vencidos (Rm 4, 25). 1 Pentecostés era una ,de las tres grandes fiestas judías ; fiesta de acción de gracias por la recolección. Se ofrec/an en el templo dos panes · fermentados, amasados con harina nueva. Se conmemoraba además la promulgación de la Ley en el monte Sinaf. La recolección material ce– lebrada con gozo extraordinario por los judíos es símbolo de la co– secha espiritual, inaugurada por los apóstoles en este día.

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