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-65- las reglas de prudencia y sabiduría que deberíamos usar en el cumplimiento de sus consejos y preceptos. La lec– ción de hoy se concreta a.lo elemental de !ajusticia cris– tiana; los rabinos habían reducido la Ley y los Profetas a la legalidad, a la materlaÍidad de la letra; habíanla va– ciado del sentido espiritual: «En verdad os digo, afirma Jesucristo, que si vuestra justicia no es mayor que la de los escribas y fariseos, no entraréis en el reino de los cie– los;> desciende enseguida a las relaciones de los hom– bres entre sí y las fundamenta en el respeto y en el amor mutuo, afirmando resueltamente que el «no matards» de la Ley es algo más que tina amenaza policiaca que detenga el brazo asesino· ante la sanción · penal de las leyes humanas: que es el seguro de Dios puesto en fa– vor de todos hasta en el pensamiento y en el corazón de cada uno, donde no puede consumarse impunemente una .ofensa al prójimo; así asegura el orden y la tran- . quilidad, y aun se hace solidario Dios de cuanto al pró– jimo ofenda, puesto que no admite ofrendas religiosas de manos manchadas con sangre; ni alabanzas de labios amargados con el odio. Argumento.Apologético Y no podría ser de otra manera sin aceptar el fa– risaismo ·la hipocresía como regla de las relaciones de los hombres entre si; la justicia que nos liga con nues– tros semejantes es inseparable de la que debemos al mismo Dios, es por lo mismo algo interior y anterior a toda ley humana y a todo derecho hu.mano. Es ya insu– frible el ruido que se hace hoy en el mundo con la pa- 5 \

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