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-61- pueblos arruinados y huesos secos de sanguinarios per– seguidores, la barquilla de Pedro, en la que boga el Om– nipotente, sigue internándose y echando redes y pescan– do almas para el cielo, y se oye en ella la palabra sobe– rana y dulcísima de Jesús de Nazaret. Todos cuantos na– vegan embarcados en la Iglesia se salvan; los que de ella se salen, se hunden en el profundo mar; los que no entran en ella, se condenan. Pero... si Jesús quería que le oyeseidos que estaban en la playa, ¿porque los deja con la miel en los labios y se interna en el lago hasta que le pierden da vista?... Otra cosa misteriosa, pero muy importante por su significado; el pueblo judío pretendía que Jesús fuera so– lo para ellos; se enfurecían cuando Jesús hablaba de que los gentiles tenían igual derecho que ellos a entrar en el Reino de los cielos, y por eso los escribas, los fariseos y los príncipes de Israel perseguían al Señor; es decir, querían amarrar la barca a sus playas,de manera que si alguno pretendía ser discípulo del Mesías :prometido, primeró debía hacerse judío y luego cristiano. Ya veis si era pretensión la suya. ¿Qué niño espaflol o americano, francés o inglés hubiera llegado a gozar del beneficio de la Redención, si se obligara a todos a hacerse antes ju– díos?.. ninguno. He aquí por qué Jesús se aleja de la ori– lla. y manda a los apóstoles echar las redes en alta mar;. gracias a ese mandato los pueblas extraflos a los judíos oyeron la predicación del Evangelio y nosotros hemos nacido en país cristiano católico; las redes de Pedro en– volvieron nuestra Patria y todos conocemos a Jesús y le amamos y le invocamos y le recibimos. También el diablo quiere que vosotros os quedéis fuera de la Iglesia, o que, rompiendo la red como aquellos peces revoltosos, os pa– seis. al campo enemigo, os manda malos amigos que os engañen, malos libros y a veces maestros perversos; no ·