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podamos gozar de los beneficios que trae al :alma· y a la sociedad. l. Naturaleza y necesidad de la paz. II. María, Reina de la paz. III. Los misioneros, heraldos de la paz. J. NATURALEZA Y N:ECESIDAD DE LA PAZ Según el pensamiento de San Agustín, la paz no es otra cosa que la tranquilidad del orden. Cuando toda cosa y todo hombre ocúpa su pues– to con la debida subordinación a los valores hu~ manos y espirituales, y todo se somete al dominio supremio, reina la tranquilidad y, consiguiente– mente, la paz. El orden en nuestra vida física nos trae la sa– lud; el orden de nuestra vida moral, la paz inte– rior de· Ia conciencia; el orden en la familia causa la paz y la alegría en el hogar; el orden de las fa– milias y de los reinos o repúblicas causa la paz nacional. El orden de los Estados,• unos con otros, la paz internacional. Son incontables las ventajas que causa la paz en el orden individual, familiar, social e interna– . cional. Por el contrar.io , ¡cuántas penas. c.ausa .la :_falta .;.:...:· 5:gs: ......