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CONF. U,-REQUISlTOS PARA SER BUEN SUPERIOR 37 traria, a no complacer nunca... No son expresiones pa~ ternas de un Superior decir: ¡Anda, que sufra, que se fastidie, que aprenda, que aguante ... ! Es claro que no todas las cosas puede conceder sin causa y sin motivo. Es necesaria una firmeza racional para conservar la disciplina y no violentar las conciencias. Pero en estos casos una negación, un no, debe revestirse y adornarse de tal manera, que el súbdito se convenza de que no es por mala voluntad, sino por deber; que no procede de la ·falta de bondad, sino de la delicadeza de conciencia... 3. La tolerancia. Tolerar quiere decir soportar con indulgencia. La tolerancia excluye la precipitación, la pedantería, la inoportunidad, las reacciones bruscas... En las Comunidades no faltan religiosos díscolos, re– beldes, de mal carácter, inobservantes, flojos o malignos. De todo se quejan, nunca están contentos, de todo y de todos murmuran... Al Superior no le faltarán cruces, disgustos, conflic– tos... Con prudencia y con calma ha de saber esperar la ocasión más oportuna para avisar y corregir; no hacer perder la paz por minucias de poca importancia, que son más bien defectos de .carácter que de malicia. Que no se haga insoportable con avisos, con correcciones, con cas– tigos... No debe ser inflexible y rígido en todo... No a todos se puede exigir lo mismo. Ni todos eri las Comuni– dades son santos. Tenga presente que lo óptimo es ene– migo de lo mejor. San Bernardo, en uno de sus sermones, afirma que es cosa imposible gobernar a los hombres sin '1a dulzura; y se sirve de una comparación atrevida, diciendo qu~ así como es imposible agradar a Dios sin la fe, así es también