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CONF. XVI.-···ADAPTACIÓN Y RENOVACIÓN 247 rados, que viven en la realidad de las cosas, con criterio serio y ponderado, dicen: Ni todo lo antiguo, por ser an– tiguo, es malo, ni todo lo moderno, por ser moderno, es bueno. El tiempo no es aquí el criterio de verdad ni de bondad. El principio en el orden espiritual es el mismo del principio filosófico de León XIII: Vetera nobis auge– re et perficere. Conservar lo antiguo bueno y perfeccio– nar lo imperfecto; aceptar lo moderno bueno que sirva para perfeccionar, mejorar y progresar... Se debe admitir una renovación, perfeccionando y mejorando; tina adaptación sin relajamiento y sin retro– ceso en la vida espiritual. 2. CAMPOS DE ADAPTACIÓN ¿Qué cosa comprende la adaptación? ¿A qué cam– pos se extiende? La vida religiosa es muy compleja y contiene muchos órdenes o aspectos diferentes; por esto, decir renovación, adaptación..., es decir mucho y decir poco. Se deja el problema en el aire, sin concretarlo a los diversos sectores o facetas de la vida religiosa. Aquí también hay diversidad de opiniones como en todo ... Es tanta la variedad y la confusión, que difícilmente se reducen a categorías o a sistemas. Tot capita, tot sen,– tentiae! Pero para la exposición vamos a reducir también la materia de adaptación a tres opiniones principales: 1) Una extrema, radical y total que sostiene la adap– tación en todo sin hacer distinciones. Es necesario mar– char con el mundo, progresar como la sociedad; el único límite es el dogma y la moral, y aun éstos saberlos adap– tar.. . Ne quid nimis ...