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204 GUÍA DE SUPERIORES a) La primera fuente, más limpia y más pura, son sus mismos escritos, las obras que nos dejó. En ellas descubre su alma, sus emociones más íntimas; cada frase es un pensamiento vivido y sentido. San Francisco no fué un escritor de profesión, ni un copiador o compila– dor; escribió impulsado por su espíritu interior, dijo cán– didamente io que sentía su corazón abrasado. Es necesa– rio para esto meditar sus escritos auténticos, no los du– dosos o espúreos... Según los últimos estudios críticos, las ediciones más auténticas son las de Leonardo Lem– mens, O. F. M. (23), Boehmer (24), Goetz (25) y Pablo Sabatier (26). Los opúsculos del Santo pueden dividirse en tres clases: Legislación franciscana; Enseñanzas de San F'rancisco: Admoniciones u Cartas; Alabanzas y ple– garias. Otros hacen otras clasificaciones más o menos ob– Jetivas, pero en la substancia nada cambian la autenti– cidad ni el valor (27) . b) Biografías del Santo e Historia de la Orden. Su vida se nos ha transmitido por sus biógrafos. Existe una multitud inmensa de biografías del "Poverello". Desde el siglo xm hasta nuestros días los historiadores del Santo se han multiplicado indefinidamente. La gran figura de San Francisco ha llamado la atención de propios y extra– ños; no ya sus hijos se han esforzado en escribir las ges- (23) Opuse. S. P. Francisci Assisiensis, Quaracchi, 1904. (24) Analekten zur Geschichte des Franciscus von Assisi, herausgegeben von H. BoEHMER, Tübíngen-Leípzíg, 1904. (25) WALTER GoETZ, Die Quellen zur Geschichte des hl. Franz von Assisi, Gotha Perthes, 1904. (26) PAUL SABATIER, Examen de quelques récents travaux sur les opuscules de Saint Frangois (Opuse. de crít. híst., t. II, fase. X) , París, 1904. (27) P. GRATIEN, O. M. Cap., Les opuse. de S. Frangois d'A1- sise, p. XV, París, 1935.