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194 GUÍA DB SUPBRIORBS l. De algunas características del espíritu franciscano. 2. Medios para conocer el espíritu franciscano. 3. Práctica del espíritu franciscano. 4. Propagación del espíritu franciscano. l. DE ALGUNAS CARACTERÍS'IICAS DEL ESPÍRITU FRANCISCANO Para algunos el espíritu franciscano específico no existe (3) , como no existe el dominicano, el cartujano, benedictino, jesuítico... No hay más que un solo espíritu verdadero: el espíritµ cristiano. Este modo de pensar es demasiado radical. Ya sabemos que el Evangelio es nor– ma común para todos, que Jesucristo es el modelo uni– versal de toda santidad; pero ese elemento genérico no quita las diferencias peculiares de cada Orden o Institu– to. El sol lanza sus rayos de luz a todos los objetos del universo, pero cuando llegan a nuestras pupilas a través de cristales de diversos colores aparecen con el color del medio que lo transmite; envía su calor a todas las plantas de la naturaleza, pero cada una produce los frutos corres– pondientes a su especie. Jesucristo es el sol que ilumina y vivifica las almas; pero éstas serán iluminadas según el medio ambiente, y darán los frutos espirituales corres– pondientes a la especie espiritual a que pertenecen. Otra comparación nos hará comprender estas diferencias. San Pablo dice que somos templos del Dios viviente (4). Aho– ra bien; en un templo hay fundamentos, paredes, techo, dimensiones, cosas y líneas comunes a toda construc- (3) P. UBALDO D'ALENCON, O.M. Cap., L'Anima Francescana, vers. italiana, p. 9. Reggio-Emilia, 1928. (4) Nescitis quia templum Dei estis, et Spiritus Dei habitat in vobis? I Cor., III, 16.