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152 GUÍA DE SUPERIORES diciendo: "La caridad es sufrida, es benigna; la caridad no tiene celos, no se pavonea, no se infla, no traspasa el decoro, no busca lo suyo, no se exaspera, no toma en cuen– ta el mal. No se goza de la injusticia, antes se goza con la verdad. Todo lo disimula, todo lo cree, todo lo espera, todo lo tolera" (14). Un breve comentario a las palabras del Apóstol. l. Caritas patiens est. El Superior caritativo es pa– ciente. Jamás reprende o castiga cuando está enfadado, de mal humor... Se abstiene de palabras ásperas, iróni– cas, ofensivas, que puedan lastimar la caridad y la cor– tesía. Sufre sin quejarse las importunidades, los carac– teres, las faltas de consideración y de respeto. Soporta la ignorancia, la grosería, la ingratitud... 2. Benigna est. La benignidad es una virtud que su– pone nobleza de alma; porque los que la poseen son su– periores a todo lo que se les puede hacer o decir. Con– servan Ja paz interior, la serenidad y el dominio inaíte– rable de sí mismo... La mansedumbre y benignidad son el azúcar de la conversación y el alimento de la concordia. Se dice de San Francisco Javier que muchos iban a visitarle con la única intención de experimentar tan admirable man– sedumbre y afabilidad de carácter... La respuesta suave y humilde quebranta la ira, dicen los Proverbios (15). La mansedumbre, benignidad y silencio son más efica– ces que la corrección áspera e irritante. (14) I Cor., XIII, 4-7. (15) XV, l.