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Parece que el método aceptable, a pesar de algunos reparos que pueden hacérsele, es el de discriminación: - representa un modo de acercarse y encontrarse con el carácter espe– cífico del fenómeno religioso de forma concreta y experimentada; - nos proporciona un acercamiento genético-histórico, con su fuerte lla– mada a la historia y a los otros saberes positivos sobre la religión; - supera el método meramente descriptivo, situándose en un nivel pro– piamente judicaltivo, que configura el saber filosófico. Por lo que parece cumplir los requisitos de un análisis crítico racional del hecho :religioso, si bien es preciso tener en cuenta lo positivo de cada método presentado y utilizar todos los recursos metodológicos para aden– trarse en el estudio filosófico del fenómeno religioso. CUESTIONES INTRODUCTORIAS El problema filosófico que presenta el fenómeno religioso lo conocieron ya los griegqs y romanos. Sin embargo no se pitede hablar propiamente de una verdadera filosofía de la religión hasta la llegada de la Ilustración. A partir de ella han seguido estudiándose por escuelas y autores desde dis– tintas posiciones. La filosofía de la religión es la última etapa de la interpretación del hecho religioso desde la razón. Toma el dato tal y como se lo presenta la fenomeno– logía y hace un juicio critico de su rncionalidad, proporcionando así su verí– ficación de tipo absolutamente distinto al de las demás ciencias de la religión. No puede reducirse a la religión pero tampoco diluye la experiencia religiosa en el Dios de la razón (Ilustración) ni se erige en introducción de la teología (teoría de los «praeambula fidei») o en Teodicea. Su carácter racional la · separa de todas las ciencias de la religión. Siendo fiel a su triple quehacer fundamental conduce ~ la religión a su propia esencia y a los límites de su propia coherencia natural y huma12a. Los autores están de acuerdo en la necesidad de un método apropiado a la critica filosófica para el esclarecimiento del _fenómeno religioso, pero no lo están en la elección de uno concreto. Un método propiamente filosófico será válido si reúne ciertas condicicr.zes fundamentales : partir de una des– cripción fenomenológica respetuosa con la oríginalidad e irreductibilidad del fenómeno religioso, contar con su ~arácter histórico y hacer de él urza interpretación filosófica según su racionalidad. Al lado de los aspectos positivos que se encuentran en todos los métodos y que es preciso tener en cuenta y aprovechar para profunaizar en el estuaio filosófico del fenómeno religioso hay también otros aspectos negativos que hay que tener en cuenta en el momento de valorarlos. El que mejor parece que cumple los requisitos necesarios es el método de discriminación y por ello resulta el más aceptable. 162