BCCCAP00000000000000000001097

50 MANUEL GONZALEZ GARCIA aquello que no es. "Pues una misma cosa es la que puede ser pensada y puede ser". La identidad del ser y del pensar no es ontológica, sino funcional y lógica; no se efectúa en el plano de la realidad, sino en el camino de la verdad. "Lo mismo es aquello que se puede pensar, y aquello por lo que existe el pensamiento". ¿Y qué es esto, lo único que puede pensarse, y aquello que condiciona el pensar mismo? Es lo que es, o sea lo que llamásemos ser. "Pues no encontrarás pensamiento sin lo que ;s". Lo que es es, lo que no es no es: Este es el principio de la razón y del ser, al mismo tiempo» 97 . Lo que es y lo que no es reciben su determinación en Parménides por contraste. Ambos términos son absolutos: «Es imposible e inconcebible la no existencia del Ser, como es impo– sible e inconcebible la existencia de la Nada. Este nivel absoluto de la necesidad lo expresa Parménides con el término "totalidad": el Ser e3 necesario (xps:,wu) íntegramente (miµmx.u), o sea, sin mezcla de no ser. El complemento lógico y ontológico de esta integridad positiva es la totalidad negativa de la Nada. La Nada no es, de manera tan absoluta como es el Ser. No hay en ella ningún componente de Ser, ni puede ella introducirse en el Ser» 98. Como d ser sólo puede hacer frente a la Nada -y ésta no es-, el Ser se afirma a sí mismo, relacionándose consigo mismo. No cabe la posi– bilidad de otra relación. Todos sus atributos conducen a un mismo punto. Parménides le atribuye al Ser la forma de una esfera en la cual todos sus límites equidistan del centro. Este Ser es: 1) Idéntico: excluyendo toda diversidad interna, formas o modos de ser. No sólo hay que rechazar las negaciones del Ser, sino también las afirma– ciones particulares que serían restricciones del Ser. Con ello, el ente se con– vierte en un subordinado de la Nada. La identidad excluye tanto la distinción entre la inmanencia y la trascendencia como la pluralidad inmanente. 2) Intemporal: a la identidad de Ser le corresponde la identidad del tiempo, sin sucesión, ingenerado, imperecedero, sin origen ni fin. De otro modo, se habría generado de la Nada o terminaría en la Nada. 3) Inm6vil: como un todo homogéneo, unitario y continuo, pues el Ser sólo podría moverse hacia la Nada, que no es 99. 97 IH 256; ME 155, 158; 'Fenomenología y dialéctica', en Diánoia (1973) 47. 98 PC 322. 99 Cf. ME 162-66; HE 119-21; PC 321-39; IH 254-57; 'Los conceptos de espacio y tiempo en la filosofía griega', en Diánoia (1955) 140; 'Verdad y Expresión', en Revue Internationale de Philosophie 16 (1962) 19; 'El absoluto negativo', en Diálogos 5 (1968} 70.