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EL HOMBRE Y LA HISTORIA EN EDUARDO NICOL 27 como resumen de su exposición, afirma que la aprehensión del ser pide el con– curso de la expresión, por un lado, y, por el otro, el ser que se revela es el ser de la expresión. Y, consiguientemente, la expresión se identifica con la metafísica 29 . B) Otros investigadores, que forman un segundo grupo, en un intento de mayor icomprensión, ponen otros aspectos de su filosofía o señalan los pasos de una posible evolución en su pensamiento filosófico. 1) J. L. Abellán tiene palabras que también podemos colocar en este apartado. ,Dice así: «Una vez escritas esas ligeras frases de orientación al lector, daremos marcha atrás para seguir por sus propios pasos una trayec– toria filosófica interesantísima que ha seguido in crescendo una de las líneas más consecuentes que podemos encontrar entre los filósofos emigrados; con– secuencia que se debe sin duda a una mirada siempre puesta en tres pro– blemas esenciales: preocupación antropológica, problema del historicismo y crisis de la metafísica» 30. 2) Otro de los autores que establece una «trayectoria filosófica» es A. Muñoz Alonso, que señala dos etapas en el pensamiento filosófico de E. Nícol: a) La de la psicología de la razón vital, «fundamentando la psicología sobre la situación vital del hombre, concreta e individualmente deter– minado». b) Otra ,en que pasa desde la situación vital a las evidencias que se muestran en el ser del hombre como «ser de la expresión» 31 . 3) Por su parte, J. Ferrater Mora es, si cabe, más preciso a la hora de establecer el itinerario filosófico de nuestro pensador. Señala cuatro mo– mentos: a) «Un análisis fenomenológico del hombre en situaciones vitales ... , 29 Op. cit., 515. 30 Filosofía española en América (1936,1966) (Madrid 1967) 57-58. Indicaciones genéricas de una evolución en su pensamiento filosófico las podemos encontrar en varios autores. Por ejemplo, G. Fernández de la Mora, al comentar la Psicolog,ía de las Situaciones Vitales, dice: «En él se contenía el anuncio de toda una aventura filosófica» (Pensamiento español 1963. de Azorín a Zubiri, Madrid 1964, 93). En esta misma línea inconcreta se encuentra A. Guy, que testifica el paso de una a otra inquietud filosófica al ir exponiendo el contenido de las diversas obras de E. Nicol: Historicismo y existencialismo; Psicología de las Situaciones Vitales; La idea del hombre, La vocación humana; Metafisica de la exp,resión; El problema de la filosofía hispánica. Cf. Los filósofos de ayer y de hoy (Buenos Aires 1966) 216-19, 303-4. En su última obra, Histoire de la Philosophie espagnole (Toulouse 1983, 285-87) tras exponer los datos biográficos de E. Nícol, se limita a indicar someramente el con– tenido de las siguientes obras: Psicología de las Situaciones Vitales (1941), La idea del hombre (1946} (de la que sólo da el título), Historicismo y existencialismo (1950), La vocación humana (1953), Metafísica de la expresión (1957) -que considera la mejor manifestación del pensamiento de E. Nícol-, 'La operación cartesiana y la estructura dia– lógica del ser' (Revue de Métaphysique et de Mora/e), Los principios de la ciencia (1965). En la traducción española, cf. 354-56. 31 'España', en Las grandes corrientes del pensamiento contemporáneo. I: Pano– ramas nacionales, t, 1 (Madrid 1959) 398.

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