BCCCAP00000000000000000001097

EL HOMBRE Y LA HISTORIA EN EDUARDO NICOL 223 mismo tiempo, se transforma con obras nuevas. En la constante creac1on del mundo, aparecen unos componentes que, en escala jerárquica, van del espacio al arte, pasando por la physis, la praxis y la religión. El mundo es el punto en que se enlaza la situación vital con la acción, conduciéndonos a la ontología. El mundo es la morada común, donde la estructura ontológica del ser potencial se transparenta en cada centro óntico espacial y temporal, que son los hombres. Estos, coordenados y correlativos, se integran en el mundo. 2.-La causalidad histórica Tanto en el universo como en el mundo, todo sucede según causa o razón suficiente, que es específica para cada uno de los reinos de seres: naturaleza inorgánica, seres orgánicos y hombres. Pero la coherencia y armonía del universo sugiere la posibilidad de que la naturaleza inorgánica esté dentro de un sistema dinámico evolutivo. Los seres orgánicos, por su parte, forman un sistema real evolutivo filogenético. Y los hombres tienen poder de transformarse a sí mismos, junto con la capacidad de legar y heredar la tradición. La causalidad propia de los hombres, la histórica, se desarrolla dentro de la trama de la existencia humana y a través de los factores de la acción, es decir, la necesidad, la contingencia (la libertad) y el azar, cuya interrela– ción explica las variaciones en el horizonte histórico. Aunque la historia muestra, desde el sector óntico o existencial, una relación intersubjetiva en la que se entremezclan concordia y discordia, paz y guerra, una historia universal auténtica ha de poner de manifiesto las dimensiones de una comunidad ontológica, en la cual, además de la inhe– rencia general en el Ser, el hombre es «símbolo» del hombre. Todo hombre necesita ser con el otro para completarse en su insuficiencia ontológica. Y, por ello, lo importante no es la discordia existencial sino la hermandad ontológica. Toda la historia se rige por una ley que tiene una doble estructura: a) La estructura vertical, que corresponde a la situación histórica. b) La estructura horizontal, que revela la continuidad histórica. La causalidad histórica se encuentra propiamente en la estructura ho– rizontal, en donde aparece la evolución y continuidad de la tradición. 3 .-El conocimiento Hablar del conocimiento es hablar del hombre, porque se trata de una actividad existencial que depende de la estructura de su ser. El hom– bre no puede existir sino conociendo la verdad. Tradicionalmente, la verdad ha sido encuadrada en dos relaciones: La

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz