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EL HOMBRE Y LA HISTORIA EN EDUARDO NICOL 147 2) Establecer, dentro de cada reino de entes reales, la causalidad es– pecífica. Sólo en referencia a la constitución ontológica y óntica podemos afirmar que toda causa es determinada y necesaria, pues se afirma una regularidad o uniformidad no determinista, que «cualquiera que sea el efecto, éste es referible a la manera de ser del ente que lo produjo» 482 • Si no dispusiéramos de esta última seguridad ontológica, y ante el principio de indeterminación vigente en este momento en 1a ciencia, no tendríamos explicación para la regularidad de las causas y los efectos se convertirían en «un fenómeno puramente aleatorio, contingente» 483 • En el orden epistemológico, sin embargo, la causa (determinada y necesaria ontológica y ónticamente), no siempre será clara e inmediatamente manifiesta. La meta de la ciencia es conocer el ser, dinámico y cambiante, no prever un futuro predeterminado necesariamente 484 • Establecida esta teoría general de la causalidad, E. Nícol entra en la determinación de la causalidad en cada uno de los reinos de entes reales. 2. LA CAUSALIDAD EN LA NATURALEZA INORGANICA (FISICA) E. Nicol propone una hipótesis de sistema abierto, es decir, que afirma la temporalidad del ser inorgánico. Enuncia tal hipótesis con las siguientes palabras: «La absoluta determinación en física es imposible, cualquiera que sea la escala de magnitudes, porque la naturaleza inorgánica constituye un sistema real abierto, es decir, un sistema dinámico evolutivo» 485 • En virtud de la hipótesis de que el ser inorgánico es devenir, toda la realidad inorgánica es concebida como energía, como dinamicidad, cuya consecuencia no sería el sólo movimiento,· sino el cambio en cuanto es evo– lución y transformación, más allá de la simple y cambiante relación espacial. Esta hipótesis traería consigo la imposibilidad de determinar con pres cisión exacta el futuro, ya que «sólo podría preverse el futuro parcialmente, en tanto que el futuro representa, en la continuidad del proceso evolutivo, una repetición parcial del pasado» 486. · · 482 PC 176. Cf. también 193. 483 PC 105. También puede verse 104, 112, 176, etc. 484 a. PC 104, 176, 185 y particularmente 103, donde dice: «No se hace la ciencia para prever. Se hace para conocer. Si el conocimiento permite en algunos casos la previsión, ésta es una ventaja subsidiaria». 485 PC 186. 486 Ibid.