BCCCAP00000000000000000001091

Otro aspecto de la exégesis actual es que, por lo que se refiere a Lucas, trabaja con el texto -roo ~Atou EKAtnóv-roc;. Finalmente, al trazar este cuadro, advirtiendo que la exégesis actual trabaja con el método -o al menos el espíritu- d.e la Redaktionsgeschichte, no parece que se pueda presentar como panorama de exégesis lo que ha alcanzado la Redaktionsgeschichte en un punto tan particula– rizado. No obstante, hay ciertos estudios particulares que los cita– remos en nuestro trabajo exegético. III. BALANCE Y NUEVAS PERSPECTIVAS Al final de este recorrido se llega a la conclusión de que el tema de las tinieblas ofrece unas condiciones singulares por ver cómo se hace exégesis según las diversas épocas. El viaje no ha sido es– téril. Ahora, concentrando todo lo que se ha visto, se impone una valoraeión crítica de resultados: acusar los fallos, discernir los pun– tos válidos y trazar las líneas por donde debe continuar el trabajo. BALANCE l. La clave de lectura histórico-física a) Las tinieblas de la muerte de Jesús fueron un "hecho" (fí– sico y concreto) y un hecho "sobrenatural". Afirmación de toda la patrística, incluidos los apócrifos, de toda la exégesis medieval, de los católicos hasta más o menos el concilio Vaticano II, de los protestantes hasta la aparición del racionalismo, proseguida luego por la tendencia conservadora de los mismos. Afirmación notada incluso por algunos con cierto "valor teológico" (sententia commu– nis, temerario lo contrario, tradición unánime y constante de la Iglesia). Tinieblas que tuvieron un ámbito de extensión regional o uni– versal. En este particular desde siempre se han dividido los auto– res, y los exegetas se han complacido en trazar elencos: quiénes piensan que fueron territoriales y quiénes universales. Tinieblas que tuvieron su causa astronómica: el sol retiró sus rayos hacia dentro de si mismo (san Jerónimo), o hubo unas "man– chas solares" (Calmet), o un eclipse milagroso presenciado por Dio- 66

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz