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más exhaustivamente, con la literatura rabínica. Para las tinieblas, como comentario a Mt 27,45, presenta tres bloques de material 92 • Primer bloque: Acontecimientos prodigiosos con ocasión de la muerte de célebres rabinos. Dos elencos: 10 caso,s de muertes de rabinos, tomados del Talmud de Jerusalén (Abada Zara 3,42s); 12 casos similares del Talmud de Babilonia (Mo'ed Qatan 25b). Segundo bloque: Cuatro Baraitot y otras tradiciones paralelas sobre el significado que tiene el oscurecimiento del sol y la luna {Sukka 29a). Tercer bloque: Un texto del Midrás sobre las Lamentaciones 3,28 / 71b. (Dios hace duelo, como un rey de carne y sangre, y por eso está escrito Is 50,3 y Jl 2,10). Como estos textos, a diferencia de los de Weststein, se hallan en manos de todos los estudiosos resulta superfluo detallar elencos. Se trata siempre, como es obvio, de textos postcristianos. III. INTERPRETACIÓN EN LOS ÚLTIMOS DECENIOS l. Contexto En el campo católico, la encíclica Divino afflante Spiritu marca un hito en la exégesis al dar plena carta de naturaleza al principio de los "géneros literarios". En el caso de las tinieblas, por ejem– plo, el intérprete deberá preguntarse si el aparente relato perte– nece al género histórico o a otro género que no reclama la histo– ricidad física de lo allí testimoniado. Esto puede dar un viraje absoluto a la interpretación. Posteriormente a la encíclica hay que mencionar la instrucción de la Comisión Bíblica De historica Evan- 92 H. L. Strack / P. Billerbeck, .Kommentar zum Neuen Testament aus Tal– mud und Midrasch I (München 1926) (Mt 27,45) 1040-1042. Para las fuentes de Billerbeck véanse las siguientes indicaciones. Primer bloque: M. Schwab (ed.), Le Talmud de Jérusalem VI (Paris 1960) 207-208. Las noticias referentes a R. Samuel bar Isaac se encuentran también en jPea 1,15d; 31 (Schwab, Talmud II, Paris 1962, 13, nota 3) ,Y en bKet 17a (I. W. Stotki, Kethuboth, en I. Epstein [ed.J, The Babylonian Talmud, Seder Nashim II [London 1938] 94). Para el segundo elenco del primer bloque: D. H. M. Lazarus, ilfo'ed Katan, en I. Epstein, The Babylonian Talmud, Se(ler Mo'ed IV (London 1938) 163-164). Segundo blo– que: I. W. Slotki, Sukka, en I. Epstein, The Babylonian Talmud, se,der Mo'ed III (London 1938) 129-130. Las tres primeras Baraitot tienen tradiciones paralelas en la Mekhilta de Ex 12,2 (J. Z. Lauterbach [ed.J, Mekilta de-Rabbi Ismael I [Philadelphia 1976] 19) y la cuarta en el midrash "Derek Eretz 2" (A. Cohen, [ed.], The Minar Tractates of the Talmud [London 21971] 541). Tercer bloque, A. Cohen, Lamentations, en M. Simon (ed.), Midrash Rabbah VII (London 1939) 203-204, 59

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