BCCCAP00000000000000000001091

Este movimiento fue condenado por el decreto Lamentabili del S. Oficio (3/VII/1907) y la encíclica P'ascendi (7/IX/1907). En estos documentos no se deja de hablar de los milagros 80 , pero su punto de mira se centra en los mismos núcleos de la interpretación. Para sondear en la exégesis católica sobre las tinieblas, de mo– do semejante a como hicimos anteriormente, podemos recurrir a obras prestigiosas procedentes de distintas áreas: a La Sainte Bible de Bayle-Fillion (1878ss), a los comentarios a los sinópticos del exegeta alemán Paul Schanz (1879-1883), al Cursus Sacrae Scrip– turae que dirigieron R. Cornely, I. Knabenbauer y F. de Humme– lauer (1887ss). Posteriormente vendrán los comentarios a los si– nópticos del P. Lagrange, considerado como el primero entre los católicos (Me 1920, Le 1919, Mt 1922). He aquí, en puntos escuetos, el sentir católico: 1) Las tinieblas, explíquense como se expliquen, fueron un mi– lagro, es decir, un hecho físico milagroso. "Se narra la muerte in– signe de Cristo con eximios milagros" (Knabenbauer) 81 • 2) Con esto. que viene a ser un presupuesto intangible, las tinieblas fueron restringidas, y tal es el sentido circunscrito que etimológicamente se pretende dar a la expresión "toda la tierra". Bayle-Fillion, que todavía admite la autoridad del Areopagita, dice que "al menos se puede admitir que se extendieron muy allá de los límites de Palestina y que invadieron allá lejos las provincias del Imperio romano" s2. 3) Significado: solidaridad de la creac10n; aspecto punítivo con– tra los judíos. Knabenbauer dice: "En estas tinieblas estaban sig– nificadas las amenazas de los profetas: cf. Is 8,22; 13,10; Jl 2,2; Sof 1,15 etc." 83 • Pero olvida que Amós habló de tinieblas al medio– día. Esta exégesis católica, a través de los Padres, ha acudido a los textos de los profetas dato diferenciante en este caso con res– pecto a la exégesis no católica del mismo tiempo. La exégesis de las tinieblas del P. Lagrange en su comentario a Marcos ha creado para los autores católicos subsiguientes cierta autoridad. Con frecuenci!a se torna a él. 56 Se trata de tinieblas milagrosas, como estaban descritas por los profetas en el momento de los grandes castigos de Dios: JI 2,10; 3,14.15; Is 13,10; 50,3; sobre todo Am 8,9, texto ya citado &O Cf. Lamentabili 17.28 (DS 2017.2028), Pascendi (DS 1076) . 81 J. Knabenbauer, Evangelium. sec. S. Matthaeum II (Parisiis 21903) 538. s2 L. Cl. Fillion, Évangile selon S. Matthieu (Paris 1878) 553. 83 Knabenbauer, Ev. sec. S. Matth., 539.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz