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LA TEOLOGÍA EN EL SIGLO XV 1 93 Y, en fin, a Osma se le relaciona también con el humanismo en España 2 9. Y creo que no le falten títulos. Primeramente, dice ya algo el hecho de haber tenido como alumno y luego como amigo nada menos que a Nebrija. En segundo lugar, porque sus Comentaría in Symbolum Quicumque, estampados en Segovia, hacen pasar a esta ciudad como la cuna de la imprenta en España 30 • Y, por último, la vuelta de Pedro de Osma a las fuentes antiguas de la Iglesia, de la patrística y de los concilios nos hace pensar que el siglo XV español concluye con un humanismo, no meramente literario o político como el de Dante y Petrarca, sino con un huma– nismo cristiano, teológico y eclesial. En una palabra, con el mismo huma~ismo que había implantado a principios de siglo otro maestro salmantino, fray Diego Moxena de Valencia. ANEXO DOCUMENTAL FRAY DIEGO MOXENA DE VALENCIA (POST 1418) Desde hace poco, este personaje entró, por primera vez, en manuales de His– toria de la Teología en lengua italiana 31 y en lengua inglesa 32 • Parece, pues, justo que se le haga entrar también ahora en un manual de Historia de la Teología, escrito en lengua castellana, en la que él compuso la mayor parte de sus tratados y poesías, y editado por la que había sido su «alma mater». Le doy el primer lugar en la lista de teólogos salmantinos del siglo XV, no sólo por seguir el orden cro– nológico del año de la muerte, sino también por la importancia que, al parecer, está llamado a obtener, a medida que se vayan conociendo mejor su biografía, sus escritos y su pensamiento, de todo lo cual recogeré a continuación los pocos datos seguros y algunas hipótesis, unas ya razonadas y otras en vías de verificación. Y para comenzar, los dos apellidos que figuran en el título vinieron indicando hasta ahora cada uno distinto personaje franciscano, de nombre Diego: fray =:)iego Moxena (Mogena, Mojena, Mugena, Mujena, Muxena) y fray Diego de Valencia; pero todos los indicios terminaron por convencerme de que se trata del patro– nímico y del toponímico, respectivamente, de un único fray Diego. Aunque uno ' 9 José LABAJOS ALONSO, «Pedro de Osma: impulsor del humanismo y del conocimiento de Aristó– teles en Salamanca», Cuadernos Salmantinos de Filosofía, 22 (Salamanca, 1995), pp. 135-158. 30 C. ROMERO DE LECEA, El v Centenario de la introducción de la imprenta en España, Segovia, I472. Antecedentes de la imprenta y circunstancias que favorecieron su introducción en España, Madrid, 1972; id., Pedro DE ÜSMA, Comentaría in Simbolum Quicumque, facsímil del incunable segoviano, Madrid, 1977. 31 Isaac VÁZQUEZ }ANEIRO, «La Teologia nella Spagna del secolo XV», en Giulio D'ON0FRI0 (ed.), Storia dela Teología. III: Eta della Rina;cenza, Casale Monferrato, Piemme, 1995, pp. 263-310. 3' Id., «Theology in Fifteenth-Century Spain», en Giulio D'ON0FRI0 (ed.), History ofTheclogy. III: The Renaissance, traducido por Matthew J. O'Connell, Minnesota, Collegeville, 1998, pp. 248-292, 616-618.

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